El Tsu­na­mi Asiá­ti­co de 2004

THE IMPOS­SI­BLE. Espa­ña-Esta­dos Uni­dos, 2012. Un film de J.A. Bayona

Las con­se­cuen­cias del impla­ca­ble tsu­na­mi que hacia fines de diciem­bre de 2004 arra­só a varias regio­nes cos­te­ras de Asia es lo que con­si­de­ra el direc­tor cata­lán Juan Anto­nio Bayo­na en The Impos­si­ble. Con un rea­lis­mo sor­pren­den­te, el rea­li­za­dor abor­da la catás­tro­fe del terri­ble mare­mo­to cen­tran­do su aten­ción en una fami­lia de turis­tas bri­tá­ni­cos que lle­ga dos días antes de la tra­ge­dia al para­di­sía­co bal­nea­rio de Phu­ket en Tai­lan­dia para pasar sus vaca­cio­nes navi­de­ñas. En esen­cia, el guión de Ser­gio G. Sán­chez está basa­do en la his­to­ria real sumi­nis­tra­da por María Belón sobre el dra­ma que le tocó vivir a su pro­pia fami­lia en esos cruen­tos momen­tos. Si bien se tra­ta de una fic­ción, algu­nos aspec­tos del rela­to han sido modi­fi­ca­dos pero sin alte­rar mayor­men­te los acon­te­ci­mien­tos reales vividos.

Pla­yas des­lum­bran­tes con aguas trans­pa­ren­tes y un cie­lo radian­te ofre­ci­do por la natu­ra­le­za cons­ti­tu­yen una exce­len­te bien­ve­ni­da para Henry Belon (Ewan McGre­gor), su espo­sa María (Nao­mi Watts) y sus 3 hijos de 5, 8 y 12 años; no obs­tan­te, la dicha será de cor­to alcan­ce cuan­do a esca­sos dos días de esta­día un vigo­ro­so tsu­na­mi irrum­pe pro­du­cien­do un cala­mi­to­so cata­clis­mo. La incon­men­su­ra­ble fuer­za del tem­po­ral que pro­vo­có gra­ves inun­da­cio­nes ter­mi­nó arra­san­do bos­ques, derrum­ban­do edi­fi­cios y un sin­nú­me­ro de cala­mi­da­des adi­cio­na­les, inclu­yen­do una gran can­ti­dad de víctimas.

El desas­tre oca­sio­na que la fami­lia Belon que­de dis­per­sa. Por una par­te, las aguas arras­tran a María y a su hijo mayor Lucas (Tom Holland), don­de ella sufre serias heri­das que la obli­gan a depen­der de su vás­ta­go para poder­se movi­li­zar. Entre­tan­to, Henry jun­to con sus otros dos hijos, Simón (Oaklee Pen­der­gast) y Tho­mas (Samuel Jos­lin), aguar­dan la lle­ga­da del equi­po de res­ca­te para que des­pués Henry, dejan­do a los niños en un refu­gio de pro­tec­ción, par­ta para tra­tar de loca­li­zar a María y Lucas. Lo que sigue es un extra­or­di­na­rio rela­to don­de los sen­ti­mien­tos de sole­dad y angus­tia que afli­gen a sus pro­ta­go­nis­tas coexis­ten con el espí­ri­tu de super­vi­ven­cia que les anima.

Tom Holland y Naomi Watts

Tom Holland y Nao­mi Watts

La actua­ción es inob­je­ta­ble. Tan­to Watts como McGre­gor des­plie­gan una enor­me fuer­za físi­ca a la vez que trans­mi­ten con auten­ti­ci­dad la cri­sis emo­cio­nal de sus per­so­na­jes; ade­más, es nece­sa­rio resal­tar la labor de los peque­ños acto­res y muy en espe­cial la de Holland, quien en su pri­mer papel para el cine, ofre­ce una admi­ra­ble com­po­si­ción como pro­tec­tor de su madre a la vez que demos­tran­do una deter­mi­na­ción y tena­ci­dad a toda prue­ba para tra­tar de reu­nir nue­va­men­te a los miem­bros de su familia.

Bayo­na abor­dan­do un tema com­ple­ta­men­te dife­ren­te del con­si­de­ra­do en “El Orfa­na­to” (2007) ha logra­do un film de vis­ce­ral inten­si­dad que no tie­ne des­per­di­cio alguno y que refle­ja los valo­res fami­lia­res y los indi­so­lu­bles lazos que unen a una fami­lia en situa­cio­nes lími­tes de deses­pe­ra­ción e incertidumbre.

Con­clu­sión: Nadie podrá per­ma­ne­cer indi­fe­ren­te al modo en que Bayo­na logró repro­du­cir el tsu­na­mi obte­nien­do espe­luz­nan­tes imá­ge­nes que ofre­cen una sen­sa­ción de asom­bro­sa vero­si­mi­li­tud. The Impos­si­ble es un film de cali­dad, deci­di­da­men­te reco­men­da­ble. Jor­ge Gutman