Los Guar­dia­nes de la Puerta

THE GATE­KEE­PERS. Israel-Fran­cia-Ale­ma­nia-Bél­gi­ca. Un film de Dror Moreh 

Bajo cual­quier ángu­lo que se lo ana­li­ce, este docu­men­tal es audaz, sor­pren­den­te y abso­lu­ta­men­te cau­ti­van­te al refe­rir­se a un tema álgi­do que preo­cu­pa a Israel, a sus veci­nos y al mun­do ente­ro. No resul­ta fre­cuen­te que per­so­na­jes como los pro­ta­go­nis­tas de este rela­to sue­lan efec­tuar decla­ra­cio­nes tan hones­tas como cru­das que lle­gan a asom­brar por­que su con­te­ni­do per­te­ne­cen nada más ni nada menos que a quie­nes tuvie­ron como deli­ca­da misión la de res­guar­dar la segu­ri­dad inter­na y exter­na de Israel; así tam­bién es loa­ble cómo el rea­li­za­dor israe­lí Dror Moreh con la cola­bo­ra­ción del edi­tor Oron Adar, logró que The Gate­kee­pers se con­vier­ta en un docu­men­to escla­re­ce­dor, alta­men­te rele­van­te y fácil­men­te acce­si­ble al públi­co espectador. 

Lo que lo dis­tin­gue de otros tra­ba­jos simi­la­res es que este film es ana­li­za­do des­de la pers­pec­ti­va sin­gu­lar de seis ex direc­to­res del Shin Bet — agen­cia del Ser­vi­cio de Segu­ri­dad de Israel– a saber: Avraham Sha­lom, Yaa­kov Peri, Car­mi Gillon, Ami Aya­lon, Avi Dich­ter y Yuval Dis­kin quie­nes ejer­cie­ron sus fun­cio­nes en dife­ren­tes perío­dos entre 1980 y 2011. 

El docu­men­tal pasa revis­ta al dra­má­ti­co y san­grien­to con­flic­to exis­ten­te entre israe­líes y pales­ti­nos comen­zan­do con la Gue­rra de los Seis Días de 1967 y la con­si­guien­te ocu­pa­ción israe­lí de los terri­to­rios pales­ti­nos y hacien­do refe­ren­cia a algu­nos otros acon­te­ci­mien­tos que se pro­du­je­ron pos­te­rior­men­te; entre los mis­mos figu­ran el cono­ci­do ase­si­na­to de los terro­ris­tas que fue­ron cap­tu­ra­dos des­pués del secues­tro de un auto­bús en su ruta de Tel Aviv a Ash­ke­lon en 1984, el sur­gi­mien­to de la pri­me­ra Inti­fa­da, los Acuer­dos de Oslo de 1993 entre el gobierno de Israel y la OLP alen­tan­do gran­des espe­ran­zas de paz, el ase­si­na­to del Pri­mer Minis­tro Yitzhak Rabin en 1995 por un faná­ti­co judío de la dere­cha radi­cal israe­lí, las nego­cia­cio­nes de Ehud Barak y Yas­ser Ara­fat de Camp David en 2000 que habían sido aus­pi­cia­das por el pre­si­den­te Clin­ton, los aten­ta­dos de los már­ti­res sui­ci­das pales­ti­nos has­ta lle­gar al momen­to actual de estan­ca­mien­to entre las par­tes en pugna.

Los seis ex directores del Shin Bet

Los seis ex direc­to­res del Shin Bet

Sin ofre­cer excu­sas o dis­cul­pas de nin­gu­na cla­se, los entre­vis­ta­dos –siem­pre actuan­do bajo la auto­ri­dad del Pri­mer Minis­tro- no han teni­do empa­cho alguno en seña­lar que han uti­li­za­do la fuer­za para exter­mi­nar a los enemi­gos indi­ca­dos por el gobierno así como no hubo titu­beos en hacer refe­ren­cia a la con­tro­ver­sial prác­ti­ca de selec­cio­na­dos ase­si­na­tos de los pri­sio­ne­ros cap­tu­ra­dos. Todo ello crea una cier­ta sen­sa­ción de inco­mo­di­dad para quie­nes los están escu­chan­do, al tener que pon­de­rar has­ta qué pun­to las dis­cu­ti­bles téc­ni­cas de inte­rro­ga­ción, los ase­si­na­tos rea­li­za­dos y las prác­ti­cas de tor­tu­ras para son­sa­car infor­ma­ción eran nece­sa­rios para defen­der la vida de los israe­líes, dejan­do a un cos­ta­do las con­no­ta­cio­nes mora­les, éti­cas y lega­les de estas acciones. 

Ade­más de haber reu­ni­do impor­tan­te mate­rial de archi­vo, lo más impor­tan­te del film es que el direc­tor haya logra­do entre­vis­tar a estas figu­ras cla­ves y que sin tomar posi­ción algu­na, los deja­ra en com­ple­ta liber­tad de acción para que los entre­vis­ta­dos mani­fies­ten sus pun­tos de vis­ta en fun­ción de la expe­rien­cia reu­ni­da en el ejer­ci­cio de sus fun­cio­nes. En tal sen­ti­do, impre­sio­na la inmu­ta­bi­li­dad de sus ros­tros como que­rien­do no refle­jar emo­ción algu­na en las mani­fes­ta­cio­nes rea­li­za­das, así como la fran­que­za y sin­ce­ri­dad de sus opiniones. 

Aho­ra bien, si el docu­men­tal arro­ja algún men­sa­je eso debe encon­trar­se en su par­te final don­de todo este con­fe­sio­na­rio con­du­ce a un des­en­la­ce ines­pe­ra­do. Aun­que que­da cla­ro que nin­guno de los entre­vis­ta­dos guar­da sim­pa­tía algu­na con sus cole­gas pales­ti­nos, lo cier­to es que con meno­res dife­ren­cias los seis exdi­rec­to­res coin­ci­den en afir­mar que el domi­nio de los terri­to­rios ocu­pa­dos y el esta­ble­ci­mien­to de nue­vos asen­ta­mien­tos israe­líes no ha pro­por­cio­na­do nin­gún bene­fi­cio a Israel; por otra par­te el uso de la fuer­za mili­tar ha fra­ca­sa­do al no haber ofre­ci­do resul­ta­dos posi­ti­vos y que tam­po­co creen que se logra­rá en el futu­ro. En con­se­cuen­cia, la úni­ca solu­ción que sus­ten­tan es que Israel debe reabrir las nego­cia­cio­nes de paz con los pales­ti­nos para lograr una con­vi­ven­cia pací­fi­ca don­de pue­dan con­vi­vir dos esta­dos: Israel y Pales­ti­na. En todo caso, el rea­li­za­dor de este film man­tie­ne un mar­ca­do escep­ti­cis­mo por­que cree que el con­flic­to ha lle­ga­do a un pun­to de no retorno. 

Con­clu­sión: Este es un sóli­do y pro­vo­ca­ti­vo docu­men­to que tra­ta de pre­sen­tar en for­ma equi­li­bra­da una visión de lo que acon­te­ce en este infer­nal con­flic­to, a tra­vés del ínti­mo con­fe­sio­na­rio de indi­vi­duos que estu­vie­ron direc­ta­men­te invo­lu­cra­dos en la feroz lucha entre israe­líes y pales­ti­nos y que aho­ra com­pren­den que el uso de la fuer­za bru­tal o de la inac­ción a nada bueno con­du­ci­rá para el por­ve­nir de Israel y sus veci­nos pales­ti­nos.  Jor­ge Gut­man