Un Con­mo­ve­dor Dra­ma Social

LA CHIS­PA DE LA VIDA. Espa­ña-Fran­cia, 2011. Direc­ción: Alex de la Igle­sia. Dis­tri­bu­ción: Mongrel/Métropole (2013)

Salma Hayek

Sal­ma Hayek

Sin haber­se estre­na­do en sala, aca­ba de salir en video La Chis­pa de la Vida, un dra­ma expues­to como sáti­ra del rea­li­za­dor espa­ñol Alex de la Igle­sia. Sin alcan­zar el nivel de su tra­ba­jo pre­ce­den­te Bala­da Tris­te de Trom­pe­ta (2010), este film ejer­ce un rela­ti­vo impac­to por su con­te­ni­do social.

El guión de Randy Feld­man pre­sen­ta la tra­yec­to­ria vivi­da duran­te una úni­ca jor­na­da por un indi­vi­duo des­em­plea­do que tra­ta afa­no­sa­men­te de rever­tir su situa­ción. Rober­to (José Mota) ha sido un publi­cis­ta cuyo mayor éxi­to pro­fe­sio­nal fue haber con­ce­bi­do un slo­gan deno­mi­na­do “Coca-Cola: La Chis­pa de la Vida”; pero des­de hace 2 años se esfuer­za en con­se­guir un empleo. Esti­mu­la­do por su abne­ga­da espo­sa (Sal­ma Hayek) resuel­ve recu­rrir a vie­jos ami­gos y cole­gas para ayu­dar­lo a con­se­guir un pues­to; des­pués de sufrir un recha­zo por uno de ellos que aho­ra ocu­pa un car­go impor­tan­te en una gran empre­sa se sien­te pro­fun­da­men­te humillado.

Para recor­dar mejo­res tiem­pos vivi­dos, Rober­to inten­ta ubi­car el hotel don­de jun­to a su seño­ra pasa­ron la luna de miel, pero se encuen­tra frus­tra­do cuan­do com­prue­ba que aho­ra que­dó con­ver­ti­do en un museo alre­de­dor de un anfi­tea­tro romano; ahí, acci­den­tal­men­te cae al vacío pero mila­gro­sa­men­te sal­va su vida al que­dar su cabe­za cla­va­da en una barra de hie­rro. A par­tir de allí los dife­ren­tes medios de comu­ni­ca­ción se hacen eco de lo acon­te­ci­do jun­to con la apa­ri­ción de polí­ti­cos, bom­be­ros y para­mé­di­cos; fren­te a los hechos, Rober­to deci­de apro­ve­char su ines­pe­ra­da situa­ción de figu­ra céle­bre, tra­tan­do de con­se­guir el dine­ro nece­sa­rio para man­te­ner a su fami­lia, aun­que su seño­ra se opon­ga al com­por­ta­mien­to por él asu­mi­do; en otras pala­bras y a pesar de su con­di­ción, este anti­hé­roe no tie­ne repa­ro alguno para con­tra­tar a un agen­te (Fer­nan­do Teje­ro) que se ocu­pe de ven­der los dere­chos a los medios de difu­sión que deseen explo­tar su actual situa­ción. De ahí en más se gene­ra un increí­ble espec­tácu­lo cir­cen­se en don­de Rober­to es la estre­lla absoluta.

Aun­que de la Igle­sia no ha infun­di­do en este film la sufi­cien­te mor­da­ci­dad a la que la his­to­ria se pres­ta­ba, esta come­dia negra que se trans­for­ma en un dra­ma con­te­ni­do y mesu­ra­do logra refle­jar el sen­ti­mien­to de un hom­bre al que no le impor­ta ser engu­lli­do por “los leo­nes del cir­co” con tal de sal­var su dig­ni­dad median­te una fuen­te de tra­ba­jo ines­pe­ra­da que le pro­cu­ra un legí­ti­mo ingre­so. El film cuen­ta con bue­nas actua­cio­nes de Mota y sobre­to­do de Hayek en los últi­mos tra­mos del relato.

El DVD se pre­sen­ta en su ver­sión ori­gi­nal espa­ño­la con sub­tí­tu­los opta­ti­vos en ingles, como tam­bién dobla­da al fran­cés. Jor­ge Gutman