VIAGEM A PORTUGAL. Portugal, 2011. Un film escrito y dirigido por Sergio Tréfaut
Este film pertinente en la época en que se vive, donde los prejuicios pueden conducir a lamentables errores, es lo que se aprecia en el primer trabajo de ficción del director brasileño Sergio Tréfaut. He aquí una historia basada en un hecho acontecido y que por la forma en que está relatada casi se asemejaría más a un documental.
Como es sabido, todo pasajero que debe desplazarse fuera del país en que habita al llegar al lugar de destino debe cumplir con los requisitos exigidos por la policía de migración; si en teoría el trámite es sencillo, suele ocurrir que en determinadas circunstancias el viajero pueda ser interrogado y sujeto a demoras. Esta última situación es la que tiene lugar en el relato de Tréfaut quien se refiere al caso de María Itaki, una doctora ucraniana procedente de Kiev (María de Medeiros) que viaja a Portugal para reencontrarse con su marido senegalés (Makena Diop). Al llegar al aeropuerto de Faro, es objeto de un tratamiento diferente al de los otros pasajeros cuando la inspectora de migración (Isabel Ruth) le efectúa ciertas preguntas a la que su interlocutora encuentra dificultad en responder en gran parte debido a que no domina la lengua portuguesa; la ayuda de intérpretes no facilita la situación y a medida que transcurren los minutos María va siendo objeto de sospecha sobre las verdaderas intenciones que la han traído al país.
La primera parte del film, presentada ambiguamente como para que el espectador pudiera en parte justificar la actitud de las autoridades pertinentes, crea una situación tensa como asimismo alimenta la duda sobre la veracidad de las respuestas de María. Sin falsos artificios, Tréfaut conduce el relato de manera hábil como para que gradualmente entren a gravitar otros elementos donde queda claro que no existe ninguna intención turbia que llevó a María viajar a Portugal sino el legítimo deseo de reencontrarse con su marido.
En la medida que el sistema burocrático sigue su curso la situación se torna más insostenible para la visitante como consecuencia del ejercicio discrecional del poder ejercido por la oficina de migración al ampararse en el cumplimiento de las disposiciones legales. Es ahí donde el relato va ilustrando sin manipuleo alguno cómo las percepciones equivocadas de la inspectora que conduce el asunto producen situaciones lamentables que terminan violando los derechos humanos de María.
Tanto de Medeiros como la mujer cuya intimidad es invadida así como Ruth que aunque está cumpliendo con sus funciones sabe que en realidad se excede en las mismas, ofrecen completa naturalidad al posesionarse por completo de sus respectivos roles; en un papel secundario se distingue también Diop con el gesto de dignidad que exhibe en una interesante escena donde interroga a los funcionarios de migración.
Conclusión: Un film denso y de sobria realización que denuncia a quienes en el ejercicio de sus funciones ejercen un poder abusivo que conspira contra el respeto y la dignidad humana. Jorge Gutman