Un Héroe Reluctante

STRON­GER. Esta­dos Uni­dos, 2017.Un film de David Gor­don Green

La tra­ge­dia de la mara­tón de Bos­ton de abril de 2013 que pro­du­jo la muer­te de 5 per­so­nas y casi 3 cen­te­na­res de heri­dos ya ha sido tra­ta­do el año pasa­do en el film Patriots Day; aquí en cam­bio, la aten­ción se cen­tra en una de las per­so­nas que se encon­tra­ba con­tem­plan­do la carre­ra y que como con­se­cuen­cia del dra­má­ti­co even­to resul­tó gra­ve­men­te herida.

Jake Gyllenhaal

Jake Gyllenhaal carac­te­ri­za al per­so­na­je real de Jeff Bau­man, quien en el fatí­di­co día al estar ubi­ca­do en el lugar don­de explo­tó la bom­ba, per­dió ambas pier­nas. Poco antes del lamen­ta­ble suce­so, vemos a Jeff como un joven emplea­do de Cost­co, un tan­to inma­du­ro y sin ras­gos espe­cia­les que lo des­ta­quen. Man­te­nien­do una rela­ción sen­ti­men­tal inter­mi­ten­te con Erin (Tatia­na Mas­lany), des­pués de la ter­ce­ra rup­tu­ra y a fin de con­gra­ciar­se con su ena­mo­ra­da, le pro­me­te pre­sen­ciar la mara­tón don­de ella habrá de correr. Des­pués que la explo­sión se pro­du­ce, la acción se tras­la­da al hos­pi­tal don­de se ve al entu­ba­do Jeff aún en esta­do incons­cien­te; a pesar de haber sal­va­do su vida, los médi­cos no tie­nen otra opción que ampu­tar­le sus dos pier­nas gan­gre­na­das. Al des­per­tar y reco­brar con­cien­cia, aún sin poder hablar, Jeff escri­be en un papel haber vis­to a uno de los dos her­ma­nos Tsar­naev, auto­res del acto terro­ris­ta; esa infor­ma­ción resul­ta­rá de gran valor para la inves­ti­ga­ción que ten­drá a su car­go el FBI.

Lo que con­ti­núa es un recuen­to de la mane­ra en que Jeff debe adap­tar­se a su nue­va con­di­ción de vida, sin­tién­do­se pro­fun­da­men­te afec­ta­do emo­cio­nal­men­te y vul­ne­ra­ble al tener que valer­se de sus pier­nas orto­pé­di­cas para des­en­vol­ver­se, en don­de no están ausen­tes las difi­cul­ta­des pro­pias que enfren­ta por su dis­ca­pa­ci­ta­ción. La otra cara de esta tra­ge­dia es haber­se con­ver­ti­do en un ines­pe­ra­do héroe para la pobla­ción de Bos­ton que lo acla­ma por su valor de resis­ten­cia evi­den­cia­do fren­te al aten­ta­do sufri­do; sin embar­go, él rehú­sa asu­mir el papel heroi­co a pesar de que su domi­nan­te y vul­gar madre alcohó­li­ca (Miran­da Richard­son) desea­ría que no recha­za­ra la fama de la que es obje­to e inclu­so que acep­ta­ra que Oprah Win­frey vinie­ra a la casa para ser reporteado.

El direc­tor David Gor­don Green en cola­bo­ra­ción con el guio­nis­ta John Pollono que a su vez se basó en el libro de Bau­mann y Bret Wit­ter, efec­túa una narra­ción clá­si­ca de lo acon­te­ci­do con Jeff don­de lo más rele­van­te es la natu­ra­le­za que adquie­re su víncu­lo sen­ti­men­tal con Erin. Dado que él asis­tió a la mara­tón con el pro­pó­si­to de con­tem­plar la par­ti­ci­pa­ción de su pare­ja en la mara­tón, la joven expe­ri­men­ta una mez­cla de afec­to, cul­pa y con­fu­sión, tra­tan­do de bus­car su reden­ción; es así que se encuen­tra per­ma­nen­te­men­te a su lado cui­dán­do­lo y ayu­dán­do­lo de la mejor mane­ra posi­ble e inclu­so man­te­nien­do con él rela­cio­nes ínti­mas. Pre­ci­sa­men­te una de las esce­nas más fuer­tes del rela­to es cuan­do ella le anun­cia que está emba­ra­za­da y Jeff por su gran inse­gu­ri­dad reac­cio­na nega­ti­va­men­te fren­te a la pers­pec­ti­va de ser padre.

La pelí­cu­la, a pesar de que no pue­de dejar de caer en luga­res comu­nes, evi­ta en todo momen­to el des­bor­de melo­dra­má­ti­co. Sien­do un poco exi­gen­te uno habría desea­do que algu­nos per­so­na­jes estu­vie­sen más desa­rro­lla­dos, como por ejem­plo el de Car­los Arre­don­do (Car­los Sanz) quien fue el hom­bre que pron­ta­men­te soco­rrió a Jeff cuan­do se pro­du­jo la explo­sión y en don­de en un encuen­tro pos­te­rior con él ori­gi­na una esce­na con­mo­ve­do­ra. En líneas gene­ra­les el film arro­ja un sal­do posi­ti­vo, sobre todo por la exce­len­te com­po­si­ción que Gyllenhaal logra de su per­so­na­je que para­dó­ji­ca­men­te adquie­re gran­de­za a cau­sa de su des­gra­cia. Jor­ge Gutman