QUEER. Italia-Estados Unidos, 2024. Un film de Luca Guadagnino. 135 minutos
El director italiano Luca Guadagnino aborda en Queer la novela homónima semi autográfica del escritor americano William S. Burroughs (1914 – 1997) escrita a principios de la década del 50 pero publicada en 1985. Este descarnado relato sobre la soledad de un individuo, encuentra en Daniel Craig al intérprete ideal para caracterizar al personaje protagónico.
El guión de Justin Kuritzkes presenta al escritor gay William Lee (Craig) de mediana edad,-alter ego de Burrough- residiendo en México en los principios de la década del 50, tras haber huido de Estados Unidos por haber sido acusado de poseer heroína. Desolado y sin rumbo fijo, el errante Lee se solaza consumiendo opioides, transitando por las calles de la ciudad y arrinconándose en un bar local frecuentado por compatriotas expatriados; en ese sitio además de beber permanentemente dialoga con su amigo Joe (Jason Schwartzman). Su rutina se altera cuando avista a Eugene (Drew Starkey), un ex soldado de 21 años, sintiéndose fuertemente atraído por él. Aunque nunca queda clara la ambigua orientación sexual de este joven, lo cierto es que se deja llevar por la pasión que emerge de Lee a través de los ardientes encuentros íntimos que se van sucediendo.
Luchando con su adicción hacia las fuertes drogas, Lee convence a su amante de efectuar un viaje a la selva ecuatoriana a fin de ubicar una planta alucinógena que genera poderes telepáticos; allí se vincula con una excéntrica botanista americana (Lesley Manville), encargada de suministrar la droga, que habita en una cabaña acompañada de su pareja (Lisandro Alonso). Esta travesía implicará para los viajeros experimentar extrañas alucinaciones que habrán de repercutir en el surrealista epílogo del relato.
La película de Guadagnino refleja sin tapujos las aristas de la sexualidad de manera cruda aunque no desprovista de sensualidad y de ciertos atisbos de ternura; sin embargo su cóctel de drogas, alcohol y sexo, termina a la postre abrumando a través de una discutible estructura narrativa excesivamente alargada y nutrida de mínima acción. Eso no descalifica al film dado sus valores visuales resaltados por la estupenda fotografía del camarógrafo tailandés Sayombhu Mukdeeprom y en especial por la admirable actuación de Daniel Craig; en tal sentido es asombrosa la transformación del aguerrido y viril personaje de los filmes de James Bond, convertido aquí en el endeble drogadicto y alcohólico queer, ansioso de comunicarse con el mundo que le rodea.
En resumen, sin alcanzar el nivel de Call Me by Your Name (2017), ni de su penúltimo film Challengers (2024),el cineasta obtiene en Queer un honesto relato melancólico, que no obstante su lánguido ritmo, respeta el espíritu impregnado por Burroughs en su alucinada obra literaria. Jorge Gutman