El Amor Sacu­di­do por la Guerra

SOLEIL DE PLOMB / THE HIGH SUN (Zviz­dan). Croa­cia-Eslo­ve­nia-Ser­bia, 2015. Un film escri­to y diri­gi­do por Dali­bor Matanic.

Tenien­do como esce­na­rio la región de los Bal­ca­nes que fue aso­la­da por una tris­te gue­rra étni­ca en la déca­da del 90, el rea­li­za­dor y guio­nis­ta croa­ta Dali­bor Mata­nic ofre­ce tres emo­ti­vos rela­tos román­ti­cos entre una ser­bia y un croa­ta que se desa­rro­lla a tra­vés de dos déca­das. Aun­que cada his­to­ria es dife­ren­te, sus per­so­na­jes pro­ta­gó­ni­cos son inter­pre­ta­dos por los mis­mos acto­res per­mi­tien­do apre­ciar cómo los mis­mos ros­tros van cam­bian­do de expre­sión y sen­ti­mien­to en los dife­ren­tes momen­tos de tiem­po en que se desa­rro­lla la acción.

Goran Markovic y Tihana Lazovic

Goran Mar­ko­vic y Tiha­na Lazovic

El pri­mer epi­so­dio trans­cu­rre en 1991, poco antes de la desin­te­gra­ción de Yugos­la­via, don­de son bien evi­den­tes las ani­mo­si­da­des exis­ten­tes que aflo­ran entre aldeas veci­nas de dife­ren­te ori­gen étni­co. En ese mar­co nos encon­tra­mos con Jele­na (Tiha­na Lazo­vic) e Iván (Goran Mar­ko­vic) dos jóve­nes adul­tos que se aman inten­sa­men­te y se dis­po­nen a dejar sus res­pec­ti­vas aldeas para par­tir con des­tino a un lugar más tran­qui­lo y menos suje­to a las res­pec­ti­vas pre­sio­nes fami­lia­res. Sin embar­go el her­mano de Jele­na (Dado Cosic) que recién se incor­po­ró al ejér­ci­to tra­ta de evi­tar que eso ocu­rra. Con un dra­má­ti­co des­en­la­ce, el direc­tor demues­tra de qué mane­ra el viru­len­to odio impe­ran­te entre ser­bios y croa­tas des­tru­ye las ilu­sio­nes de Jele­na e Ivan.

El segun­do seg­men­to acon­te­ce en 2001 cuan­do la gue­rra ya ha con­clui­do aun­que las rui­nas de las pobla­cio­nes afec­ta­das por las bom­bas cons­ti­tu­yen un dolo­ro­so tes­ti­mo­nio de lo acon­te­ci­do. Cuan­do Natasha (Lazo­vic) y su madre (Nives Ivan­ko­vic) retor­nan a su aldea en que vivían encon­tran­do que su casa que­dó seria­men­te afec­ta­da, con­tra­tan a Ante (Mar­ko­vic), un joven para que la repa­re; sin embar­go, Natasha resien­te la pre­sen­cia de Ante por­que no pue­de olvi­dar que su gen­te ase­si­nó a su her­mano duran­te la gue­rra. Con todo, y a pesar de que un apa­sio­na­do encuen­tro ínti­mo se pro­du­ce entre ambos, resul­ta impo­si­ble que el poten­cial roman­ce pue­da con­cre­tar­se. Este epi­so­dio es el más ten­so y logra­do ponien­do cla­ra­men­te de relie­ve cómo las cica­tri­ces de la vio­len­ta gue­rra y los amar­gos ren­co­res que aún per­sis­ten impi­den la recon­ci­lia­ción de los pueblos.

El ter­cer capí­tu­lo se desa­rro­lla en 2011 cuan­do comien­za a notar­se una recu­pe­ra­ción físi­ca y eco­nó­mi­ca de la región. El rela­to trans­cu­rre en el pue­blo de Tro­gir, ubi­ca­do en Croa­cia, don­de Luka (Mar­ko­vic), des­pués de cier­to tiem­po ausen­te, regre­sa tem­po­ral­men­te para visi­tar a sus padres; Al pro­pio tiem­po y remor­di­do de cul­pa deci­de salir al encuen­tro de Mari­ja (Lazo­vic), la ex novia ser­bia a quien había aban­do­na­do en esta­do de emba­ra­zo y tra­ta de vol­ver a ella y a su hiji­to en pro­cu­ra de redención.

Con una narra­ti­va que no decae a lo lar­go del metra­je el direc­tor ha logra­do un sóli­do rela­to don­de sus tres his­to­rias guar­dan ade­cua­da cohe­sión y per­mi­ten asis­tir a la evo­lu­ción y reac­ción de los per­so­na­jes a tra­vés del pasa­je del tiem­po. Entre otro de los ele­men­tos que valo­ri­za al film es la muy bue­na y varia­da com­po­si­ción que Lazo­vic y Mar­ko­vic logran de sus tres res­pec­ti­vos per­so­na­jes. Igual­men­te Impor­tan­te es la bue­na foto­gra­fía de Mar­ko Brdar cap­tan­do la lumi­no­si­dad del verano en que trans­cu­rren las tres his­to­rias como mani­fies­to con­tras­te del con­tex­to en que se desa­rro­llan. Así tam­bién se dis­tin­gue el apor­te musi­cal de Alen y Nenad Sin­kauz que actúa como ele­men­to de tran­si­ción entre los dis­tin­tos perío­dos y alcan­za espe­cial rele­van­cia en una mag­ní­fi­ca secuen­cia de fies­ta tecno del últi­mo capítulo.

El film de Mata­nic es impor­tan­te por­que al mos­trar los con­flic­tos y secue­las de la gue­rra que se ges­tó en una espe­cí­fi­ca región euro­pea, su con­te­ni­do tie­ne vali­dez uni­ver­sal; bas­ta­ría obser­var de qué mane­ra la com­bi­na­ción de fac­to­res polí­ti­cos, reli­gio­sos y nacio­na­lis­tas que afec­tan a la hora actual a dife­ren­tes luga­res del mun­do gene­ra sen­ti­mien­tos nega­ti­vos de con­fron­ta­ción e into­le­ran­cia que deni­gran la con­di­ción del géne­ro humano. De todos modos, el direc­tor tra­ta de ser opti­mis­ta dejan­do la puer­ta abier­ta con una luz de espe­ran­za para la recon­ci­lia­ción y el amor; prue­ba de ello es que tres de los paí­ses afec­ta­dos por el con­flic­to –Croa­cia, Eslo­ve­nia y Ser­bia- han auna­do sus esfuer­zos para copro­du­cir este emo­ti­vo film. Jor­ge Gutman

La Jus­ti­cia Evasiva

ONE FLOOR BELOW. Ruma­nia-Fran­cia-Ale­ma­nia, Sue­cia, 2015. Un film de Radu Muntean

Nue­va­men­te el cine rumano ofre­ce otra gra­ta sor­pre­sa con One Floor Below del direc­tor rumano Radu Mun­tean. La ori­gi­nal his­to­ria pone a prue­ba el modo en que la jus­ti­cia pue­de resul­tar eva­si­va con res­pec­to a la vera­ci­dad de los hechos pro­du­ci­dos, tal como aquí se refleja.

Teodor Corban

Teo­dor Corban

Teo­dor Cor­ban da vida a San­du Patras­cu, un indi­vi­duo de media­na edad vivien­do en Buca­rest y sin ras­gos espe­cia­les para defi­nir­lo, sal­vo el seña­lar que tie­ne una fami­lia inte­gra­da por su espo­sa Olga (Oxa­na Mora­vec) y su hijo ado­les­cen­te Matei (Ionut Bora). Cuan­do un día, des­pués de haber pasea­do a su perro, regre­sa a su hogar subien­do las esca­le­ras del edi­fi­cio en que habi­ta para lle­gar al ter­cer piso, oye que en el depar­ta­men­to del segun­do piso se pro­du­ce una vio­len­ta dis­cu­sión entre un hom­bre y una mujer. Sin dar mayor impor­tan­cia a esa refrie­ga, todo pro­si­gue nor­mal­men­te para Patras­cu has­ta que al día siguien­te se ente­ra que la mujer del piso de aba­jo ha sido ase­si­na­da. A pesar de que tie­ne la con­vic­ción de que Vali (Iulian Postel­ni­cu), el hom­bre con el que la difun­ta com­par­tía el depar­ta­men­to ha sido el cri­mi­nal, cuan­do la poli­cía inte­rro­ga a Patras­cu éste mani­fies­ta no haber oído nada. De ahí en más, comen­za­rá a tra­ba­jar la con­cien­cia de este hom­bre cuan­do pien­sa que de haber inter­ve­ni­do en su momen­to se hubie­se podi­do evi­tar el crimen.

Debi­do a que Vali es cons­cien­te de que Patras­cu cono­ce la ver­dad aun­que no la reve­ló a las auto­ri­da­des, el rela­to adquie­re pro­gre­si­va ten­sión cuan­do el ase­sino comien­za a entro­me­ter­se en su vida fami­liar, con­vir­tién­do­se de ese modo en una laten­te ame­na­za. Sin ade­lan­tar más sobre el deve­nir de los acon­te­ci­mien­tos, la his­to­ria demues­tra cómo la cobar­día de un hom­bre hacién­do­se invo­lun­ta­ria­men­te cóm­pli­ce del ase­sino, per­mi­te que un cri­men que­de impu­ne don­de de esta mane­ra los con­cep­tos de ver­dad, moral y cul­pa aflo­ran con máxi­ma intensidad.

La exce­len­te pues­ta en esce­na se apre­cia a lo lar­go del metra­je, don­de a tra­vés de un enfo­que mini­ma­lis­ta y acu­dien­do a pla­nos lar­gos Mun­tean va escu­dri­ñan­do el com­por­ta­mien­to y la diná­mi­ca que se esta­ble­ce entre sus per­so­na­jes. Con un com­pe­ten­te elen­co que otor­ga rea­lis­mo a lo que se está pre­sen­cian­do y den­tro de un cli­ma de mode­ra­do pero efec­ti­vo sus­pen­so, el rela­to resul­ta posi­ti­va­men­te absorbente.

A pesar de no exis­tir un fuer­te impac­to dra­má­ti­co o un final con­clu­yen­te, el film es de todos modos meri­to­rio por haber des­crip­to acer­ta­da­men­te los dis­cu­ti­bles valo­res éti­cos de su prin­ci­pal per­so­na­je que ‑según la visión del rea­li­za­dor- repre­sen­ta a la socie­dad en su con­jun­to que aún se encuen­tra arrai­ga­da a cier­tos vicios de su recien­te pasa­do his­tó­ri­co. Jor­ge Gutman

Cin­co Her­ma­nas en Prisión

MUS­TANG. Fran­cia-Tur­quía-Ale­ma­nia, 2015. Un film de Deniz Gam­ze Erguven

Un rela­to hon­da­men­te femi­nis­ta expo­nien­do la situa­ción que atra­vie­sa la mujer en el mar­co de un sis­te­ma patriar­cal insen­si­ble es lo que se apre­cia en Mus­tang a tra­vés de la sen­si­ble visión de la direc­to­ra Deniz Gam­ze Erguven.

La his­to­ria de la rea­li­za­do­ra con la cola­bo­ra­ción de la co-guio­nis­ta Ali­ce Wino­cur trans­cu­rre en un remo­to pue­blo ubi­ca­do a ori­llas del Mar Negro don­de viven cin­co her­ma­nas huér­fa­nas de varia­da edad –entre la puber­tad y la ado­les­cen­cia-; la mayor de ellas es Sonay (Ilay­da Akdo­gan), y en suce­si­vo orden des­cen­den­te le siguen Sel­ma (Tug­ba Sun­gu­ro­glu), Ece (Elit Iscan), Nur (Doga Zey­nep Dogus) y Lale (Gunes Nezihe Sen­soy) que es la menor y la que se ocu­pa de narrar el film.

Las cinco hermanas

Las cin­co hermanas

Des­pués del últi­mo día del ciclo esco­lar, las her­ma­nas se apres­tan a dis­fru­tar ple­na­men­te el verano que se apro­xi­ma; así, un buen día dis­traen su tiem­po pasean­do por la pla­ya y cha­pu­cean­do en el agua con algu­nos com­pa­ñe­ros de la escue­la. Esa ino­cen­te acti­tud de haber teni­do con­tac­to con jóve­nes del sexo opues­to es obje­to de seve­ras crí­ti­cas por par­te de la abue­la (Nihal Kol­das) res­pon­sa­ble de su cui­da­do y más aún por el seve­ro tío (Ayberk Pek­can) quien imbui­do de rígi­das ideas con­ser­va­do­ras juz­ga la acti­tud de las jóve­nes como un acto inmo­ral pro­pio de pros­ti­tu­tas. La pri­me­ra medi­da adop­ta­da por el tío es some­ter a las niñas a un examen médi­co para estar con­ven­ci­do de que man­tie­nen intac­ta su vir­gi­ni­dad. El segun­do y más drás­ti­co paso es ence­rrar­las en la casa, supri­mir­les cual­quier for­ma de comu­ni­ca­ción con el mun­do exte­rior ya sea a tra­vés de compu­tado­res o telé­fo­nos y ade­más reem­pla­zar la acti­vi­dad esco­lar con lec­cio­nes de coci­na para que estan­do bien pre­pa­ra­das para las tareas domés­ti­cas pue­dan fácil­men­te encon­trar futu­ros maridos.

A pesar de la serie­dad del tema, en don­de no fal­ta­rá una nota trá­gi­ca, la rea­li­za­do­ra ha tra­ta­do de con­tar esta his­to­ria con livian­dad evi­tan­do que el film des­bor­de en un dra­món lacri­mó­geno. Si bien es cier­to que la pri­sión a la que las jóve­nes están con­fi­na­das no deja de ser dra­má­ti­ca, sus per­so­na­li­da­des vita­les, des­bor­dan­tes y con un tem­pe­ra­men­to lo sufi­cien­te­men­te incen­dia­rio como para resis­tir el cas­ti­go impues­to, moti­va que de uno u otro modo pue­dan sos­la­yar el encie­rro don­de en una de las oca­sio­nes asis­ten con un gru­po feme­nino a un par­ti­do de fútbol.

Sin adop­tar una acti­tud bur­lo­na, la direc­to­ra expo­ne el modo en que las fami­lias de la aldea con hijos sol­te­ros son invi­ta­das a la casa de las chi­cas para que la abue­la y el tío pue­dan ubi­car al can­di­da­to ideal para casar­las, comen­zan­do por Sonay por ser la mayor. Con un inusi­ta­do rea­lis­mo vemos que en estas “serias reunio­nes” cada her­ma­na es ofre­ci­da resal­tan­do sus valo­res de bue­na ama de casa, lis­ta para asu­mir el rol de bue­na espo­sa y dis­pues­ta a obe­de­cer incon­di­cio­nal­men­te a su cón­yu­ge. A tra­vés de este cua­dro surrea­lis­ta, uno pare­ce­ría estar asis­tien­do a un mer­ca­do don­de los ven­de­do­res tra­tan de ven­der sus mer­can­cías a los poten­cia­les com­pra­do­res enfa­ti­zan­do el buen nivel de cali­dad del pro­duc­to ofrecido.

Intere­san­te es la cir­cuns­tan­cia de que el film trans­cu­rra en Tur­quía, un país que con una gran diver­si­fi­ca­ción regio­nal, man­tie­ne zonas en don­de pre­do­mi­na un mar­ca­do con­ser­va­do­ris­mo que se opo­ne al secu­la­ris­mo exis­ten­te en los prin­ci­pa­les núcleos urba­nos, inclu­yen­do a Estam­bul, la impor­tan­te capi­tal que gra­vi­ta como cen­tro cul­tu­ral y fron­te­ri­zo entre las cos­tum­bres occi­den­ta­les y orientales.

Lo que se obser­va en esta his­to­ria es des­afor­tu­na­da­men­te tris­te y real, don­de Gam­ze Ergu­ven sutil­men­te evi­tó con­si­de­ra­cio­nes de natu­ra­le­za reli­gio­sa; aun­que es bien sabi­do, que muchas de las nor­mas pre­va­le­cien­tes pue­den ser atri­bui­das a la reli­gión musul­ma­na, el pro­ble­ma aquí plan­tea­do acon­te­ce en el mar­co de otras creen­cias don­de la mujer que­da rele­ga­da a un segun­do plano, suje­ta a la volun­tad de un patriar­ca­do hipó­cri­ta y cruel. A pesar de todo, la inten­ción de la rea­li­za­do­ra es demos­trar –ejem­pli­fi­can­do el com­por­ta­mien­to de las pro­ta­go­nis­tas de este rela­to- que hoy día exis­te por par­te de las nue­vas gene­ra­cio­nes feme­ni­nas una fir­me acti­tud en no dejar­se domi­nar, humi­llar y man­te­ner a toda prue­ba una posi­ción valien­te y fun­da­men­tal­men­te eman­ci­pa­do­ra de la cul­tu­ra arcai­ca domi­nan­te. Es por esa razón que la direc­to­ra deno­mi­nó “Mus­tang” a esta pelí­cu­la al alu­dir meta­fó­ri­ca­men­te a los caba­llos cima­rro­nes que dota­dos de gran resis­ten­cia y for­ta­le­za cabal­gan sal­va­je­men­te en el oes­te ame­ri­cano en pro­cu­ra de libertad.

Apar­te de la esme­ra­da rea­li­za­ción, el film sor­pren­de gra­ta­men­te por la fres­cu­ra y natu­ra­li­dad impre­sa a sus per­so­na­jes cen­tra­les carac­te­ri­za­dos por actri­ces no pro­fe­sio­na­les con la úni­ca excep­ción de Elit Escane.

Vaya una nota al mar­gen para con­cluir esta rese­ña. Es alta­men­te sig­ni­fi­ca­ti­vo que a pesar de tra­tar­se de una copro­duc­ción, esta pelí­cu­la es en todo sen­ti­do emi­nen­te­men­te tur­ca; sin embar­go el país se negó a some­ter­la para optar al Oscar de la mejor pelí­cu­la extran­je­ra; en su lugar Fran­cia ‑por ser uno de los paí­ses copro­duc­to­res- deci­dió pre­sen­tar­la a la Aca­de­mia de Holly­wood. Así, Mus­tang es uno de los cin­co títu­los nomi­na­dos, don­de el 28 de febre­ro se deve­la­rá al gana­dor. Más allá que obten­ga o no el codi­cia­do tro­feo, éste es un valio­so film de incon­di­cio­nal reco­men­da­ción que dig­ni­fi­ca la con­di­ción feme­ni­na. Jor­ge Gutman

Clá­si­cos Fil­mes en For­ma­to Digital

THE GREAT DIGI­TAL FILM FESTIVAL

Por sép­ti­mo año con­se­cu­ti­vo Cine­plex ofre­ce­rá a tra­vés de selec­cio­na­dos cines de Cana­dá el deno­mi­na­do Gran Fes­ti­val de Fil­mes Digi­ta­les.

THE GREAT DIGITAL FILM FESTIVALDes­de el 5 has­ta el 11 de febre­ro, el públi­co ten­drá opor­tu­ni­dad de vol­ver a ver o bien de apre­ciar por pri­me­ra vez en la gran pan­ta­lla algu­nos fil­mes clá­si­cos per­te­ne­cien­tes mayor­men­te a los géne­ros de cien­cia fic­ción, fan­ta­sía y del deno­mi­na­do “cine de cul­to”, pre­sen­ta­dos por pri­me­ra vez en el for­ma­to digital.

El fes­ti­val de este año inclu­ye títu­los muy recor­da­dos como Dirty Harry, Ghost­bus­ters, Incep­tion, True Roman­ce y espe­cial­men­te Mad Max: Fury Road que para muchos crí­ti­cos ha sido con­si­de­ra­do como uno de los mejo­res fil­mes de 2015.

He aquí la lis­ta completa:

    • Beverly Hills Cop (1984)
    • Big Trou­ble in Little Chi­na (1986)
    • Dirty Harry (1971)
    • From Dusk Till Dawn (1996)
    • Ghost­bus­ters (1984)
    • Incep­tion (2010)
    • Laby­rinth (1986)
    • Loo­per (2012)
    • Mad Max: The Road Warrior (1981) y Mad Max: Fury Road (2015)
    • Runa­way Train (1985)
    • Sere­nity (2005)
    • Star Trek 2: Wrath of Khan (1982) y Star Trek: Into Dark­ness (2013)
    • The Dark Crys­tal (1982)
    • The Thing (1982)
    • True Roman­ce (1993
Clint Eastwood en DIRTY HARRY

Clint East­wood en DIRTY HARRY

Tom Hardy en MAD MAX. FURY ROAD

Tom Hardy en MAD MAX. FURY ROAD

      Las salas par­ti­ci­pan­tes son las siguientes:

Bri­tish Columbia

        • Cine­plex Cine­mas Langley
        • Sco­tia­bank Thea­tre Vancouver
        • Sil­ver­City Vic­to­ria Cinemas

Alber­ta

        • Sco­tia­bank Thea­tre Chi­nook (Cal­gary, AB)
        • Sco­tia­bank Thea­tres Edmonton

Sas­kat­che­wan

        • Cine­plex Cine­mas Regina
        • Sco­tia­bank Thea­tre Sas­ka­toon and VIP

Mani­to­ba

        • Sil­ver­City Polo Park Cine­mas (Win­ni­peg, MB)

Onta­rio

        • Sil­ver­City Ancas­ter Cinemas
        • Sil­ver­City New­mar­ket Cinemas
        • Galaxy Cine­mas Guelph
        • Cine­plex Odeon Gar­di­ners Road Cine­mas (Kings­ton, ON)
        • Sil­ver­City Lon­don Cinemas
        • Cine­plex Cine­mas Court­ney Park (Mis­sis­sau­ga, ON)
        • Cine­plex Cine­mas Ottawa
        • Cine­plex Cine­mas Scarborough
        • Sil­ver­City Sud­bury Cinemas 
        • Sil­ver­City Thun­der Bay Cinemas
        • Sco­tia­bank Thea­tre Toronto
        • Galaxy Cine­mas Waterloo
        • Cine­plex Odeon Devonshi­re Mall Cine­mas (Wind­sor, ON)

Que­bec

        • Ciné­ma Ban­que Sco­tia Montreal

Pro­vin­cias Atlánticas

          • Sco­tia­bank Thea­tre St. John’s
          • Cine­plex Cine­mas Park Lane (Hali­fax, NS)

Este fes­ti­val asu­me un carác­ter popu­lar dado el pre­cio módi­co de $ 6.99 por cada film inclu­yen­do un des­cuen­to adi­cio­nal de 10% si se com­pran 2 a 4 entra­das y de 15% cuan­do se adquie­ren entra­das para 5 o más fil­mes. Para obte­ner infor­ma­ción adi­cio­nal sobre los fil­mes exhi­bi­dos, los res­pec­ti­vos hora­rios para cada uno de los cines y/o bien para la com­pra de entra­das, pre­sio­ne aquí

Una Mor­daz Sáti­ra Teatral

LES LIA­SONS DANGEREUSES

En otra de las pro­duc­cio­nes del Natio­nal Thea­tre trans­mi­ti­das des­de el tea­tro Don­mar Warehou­se de Lon­dres, el públi­co ten­drá opor­tu­ni­dad de juz­gar Les Lia­sons Dan­ge­reu­ses. Ësta es una pie­za de tea­tro deci­di­da­men­te fres­ca y agra­da­ble de con­tem­plar a pesar de su con­te­ni­do amo­ral. La mis­ma tie­ne su ori­gen en la nove­la epis­to­lar de Cho­der­los de Laclos publi­ca­da hacia fina­les del siglo 18 en don­de que­dan expues­tas las andan­zas de un per­ver­so dúo de la noble­za fran­ce­sa de ese enton­ces. Sin embar­go es en 1985 cuan­do Chris­topher Ham­pton resuel­ve adap­tar­la dán­do­le un bri­llo inigua­la­do al pun­to tal que hoy día se le atri­bu­ye la auto­ria de la misma.

Janet McTeer y Dominique West (Foto de Johan-Persson)

Janet McTeer y Domi­ni­que West (Foto de Johan-Persson)

¿A qué se debe la popu­la­ri­dad de esta obra? Sin duda a la auda­cia que Ham­pton impri­me a la nove­la a tra­vés de dife­ren­tes situa­cio­nes escé­ni­cas don­de a tra­vés de diá­lo­gos mor­da­ces que­dan expues­tos los ingre­dien­tes libi­di­no­sos de dos seres que uti­li­zan el sexo como un cruel meca­nis­mo de venganza.

En una bre­ve sinop­sis, la obra gira en torno a la intri­ga for­ja­da por la mar­que­sa de Mer­teuil quien resuel­ve ven­gar­se de su ex aman­te al saber que habrá de des­po­sar a Céci­le Volan­ges, una joven ino­cen­te recién sali­da del con­ven­to: al sen­tir­se des­pe­cha­da, ella le pro­pon­drá al liber­tino viz­con­de de Val­mont –quien tiem­po atrás fue otro de sus aman­tes- para que seduz­ca a Céci­le des­po­ján­do­la de su vir­gi­ni­dad antes de su enlace.

Morfydd Clark y Janet-McTeer (Foto de Johan-Persson)

Morfydd Clark y Janet-McTeer (Foto de Johan-Persson)

Sin embar­go, Val­mont tie­ne otros pla­nes como el de con­quis­tar a Mada­me de Tour­vel, una mujer casa­da de inta­cha­ble moral, sin sos­pe­char que en el plan dia­bó­li­co con­ce­bi­do come­te­ría el gran error de lle­gar a enamorarse.

Como una mor­daz sáti­ra don­de el jue­go fal­so del amor se entre­mez­cla con la mani­pu­la­ción, el deseo, la trai­ción y el pode­ro­so imán de la sexua­li­dad, esta pie­za ‑no exen­ta de un áci­do humor- está muy lejos de ase­me­jar­se a las obras de vode­vil del tea­tro fran­cés; por el con­tra­rio, den­tro un tono de apa­ren­te come­dia demues­tra has­ta qué pun­to la mani­pu­la­ción y un cruel maquia­ve­lis­mo son capa­ces de infli­gir serios daños a terceros.

Elaine Cassidy (Foto de Johan-Persson)

Elai­ne Cas­sidy (Foto de Johan-Persson)

La pie­za está diri­gi­da por Josie Rour­ke y el elen­co está inte­gra­do por Domi­ni­que West en el rol del muje­rie­go Val­mont, Janet McTeer en el papel de la intri­gan­te y cíni­ca mar­que­sa Mer­teuil, Elai­ne Cas­sidy ani­ma a Mada­me de Tour­vel en tan­to que Morfydd Clark inter­pre­ta a la ino­cen­te Cécile.

La trans­mi­sión en direc­to se efec­tua­rá en cines selec­cio­na­dos del cir­cui­to Cine­plex el 28 de enero y se vol­ve­rá a difun­dir el 27 de febre­ro. Para infor­ma­ción adi­cio­nal sobre hora­rios y salas per­ti­nen­tes pre­sio­ne aquí.