Un Docu­men­tal de Tintoretto

UN REBEL­DE EN VENECIA

En el mar­co de la serie In the Gallery, Cine­plex pre­sen­ta­rá Tin­to­ret­to: A Rebel in Veni­ce. Este docu­men­tal ita­liano ha sido realli­za­do por Giu­sep­pe Domin­go Romano, con­me­mo­ran­do los 500 años de este remar­ca­ble genio de la pintura.

Con el guión pre­pa­ra­do por Mela­nia Maz­zu­co, pro­duc­to­ra del film, se rela­ta la his­to­ria de Tin­to­ret­to (1518 – 1594) quien fue uno de los gran­des artis­tas del Rena­ci­mien­to que nun­ca dejó Vene­cia don­de nació y murió. En con­se­cuen­cia, la audien­cia es trans­por­ta­da a esta bella ciu­dad para des­cu­brir a este excep­cio­nal pin­tor quien por su inigua­la­ble ener­gía, ins­tin­to y pasión a la hora de pin­tar fue apo­da­do Il Furio­so; su dra­má­ti­co uso de la pers­pec­ti­va y los espe­cia­les efec­tos de luz hacen de él un pre­cur­sor del arte barroco.

The Ori­gin of the Milky Way

A tra­vés de la narra­ción de la cono­ci­da intér­pre­te Hele­na Bonham Car­ter y la par­ti­ci­pa­ción de impor­tan­tes his­to­ria­do­res, escri­to­res, cura­do­res, res­tau­ra­do­res de arte y de exper­tos don­de se des­ta­ca el direc­tor de cine Peter Gree­na­way, el film minu­cio­sa­men­te pasa revis­ta a más de vein­te pin­tu­ras y cin­cuen­ta dibu­jos ori­gi­na­les del artis­ta. Asi­mis­mo el direc­tor enfo­ca su cáma­ra en el estu­dio del pin­tor, efec­túa una visi­ta a los Archi­vos del Esta­do, el Pala­cio Ducal, el Pal­cio de los Dogos, la Pla­za San Mar­cos y la Igle­sia San Roc­co, don­de se encuen­tran algu­nas de sus obras más emblemáticas.

Es impor­tan­te des­ta­car que cuan­do entre 1575 y 1977 una trá­gi­ca pla­ga, azo­tó a la ciu­dad cobran­do la vida de más de la mitad de la pobla­ción, ha sido en ese perío­do en que Tin­to­ret­to creó su más impor­tan­te ciclo de pin­tu­ras de la Scuo­la Gran­de di San Roc­co; esa serie de lien­zos cubren la mayo­ría de las pare­des del edi­fi­cio que lle­van el nom­bre de dicha cofra­día. Igual­men­te cabe rese­ñar que a tra­vés de la vida del pin­tor, el film tam­bién incur­sio­na en el con­tex­to socio-polí­ti­co del siglo 16, una épo­ca flo­re­cien­te en mate­ria cul­tu­ral don­de igual­men­te sobre­sa­llie­ron otros impor­tan­tes crea­do­res de la Repú­bli­ca de Vene­cia como Titian y Vero­ne­se, quie­nes fue­ron los eter­nos riva­les de Tintoretto.

El docu­men­tal será exhi­bi­do en los cines del cir­cui­to cine­ma­to­grá­fi­co Cine­plex a par­tir del 8 de Sep­tiem­bre de 2019. Para infor­ma­ción adi­cio­nal pre­sio­ne aquí 

Un Popu­lar Tenor

PLÁ­CI­DO DOMINGO

Con­me­mo­ran­do el cin­cuen­te­na­rio de su pre­sen­ta­ción en el Are­na di Vero­na, el legen­da­rio Plá­ci­do Domin­go retor­na al céle­bre anfi­tea­tro ita­liano en un espe­cial con­cier­to que será retrans­mi­ti­do en Canadá.

Den­tro del cam­po musi­cal Domin­go cons­ti­tu­ye un caso excep­cio­nal en don­de ade­más de can­tan­te, igual­men­te toca el piano y es direc­tor de orques­ta. Habien­do comen­zan­do en 1959 como barí­tono, pos­te­rior­men­te can­ta­ba como tenor para vol­ver en sus años madu­ros a hacer­lo en su con­di­ción de barí­tono. Ya a media­dos de la déca­da del 60, el can­tan­te debu­tó con la New York City Ope­ra que cons­ti­tu­yó el gran espal­da­ra­zo para lo que sería su bri­llan­te carre­ra profesional.

De gran popu­la­ri­dad, que bien pue­de ase­me­jar­se a la que gozó Luciano Pava­rot­ti, se recor­da­rá que jun­to al inol­vi­da­ble tenor ita­liano y José Carre­ras par­ti­ci­pó en el cono­ci­do gru­po de Los Tres Teno­res dan­do mues­tra de su remar­ca­ble pro­fe­sio­na­lis­mo. A lo lar­go 6 déca­das desem­pe­ñó dife­ren­tes roles en casi un cen­te­nar de ópe­ras, como así tam­bién vol­có su talen­to vocal en otros géne­ros musi­ca­les como el tan­go, por ejemplo.

Has­ta hoy día sigue des­lum­bran­do a la audien­cia, como lo hizo en 1969 cuan­do hacien­do su debut en la Are­na di Vero­na, inter­pre­tó a Calaf en la ópe­ra Turan­dot de Puc­ci­ni así como can­tó el rol titu­lar en la crea­ción líri­ca de Ver­di Don Car­lo.

Este espec­tácu­lo deno­mi­na­do Pla­ci­do Domin­go 50th Anni­ver­sary Gala será pre­sen­ta­do en las salas de Cine­plex los días 7 y 11 de Sep­tiem­bre de 2019. Para infor­ma­ción adi­cio­nal pre­sio­ne aquí 

Un Impor­tan­te Maratón

BRIT­TANY RUNS A MARATHON. Esta­dos Uni­dos, 2019. Un film escri­to y diri­gi­do por Paul Downs Colaizzo.

Basán­do­se en un hecho per­so­nal que le acon­te­ció cuan­do años atrás com­par­tía piso con una estu­dian­te en Nue­va York, el direc­tor Paul Downs Colaiz­zo con­ci­bió en Brit­tany Runs a Marathon un rela­to de fic­ción que se pro­po­ne demos­trar cómo la cons­tan­cia, per­sis­ten­cia y esfuer­zo pue­den modi­fi­car los hábi­tos de una per­so­na per­mi­tién­do­le gozar más de la vida.

Jillian Bell

La pro­ta­go­nis­ta de esta his­to­ria es Brit­tany (Jillian Bell), una obe­sa joven de 28 años, ale­gre, sim­pá­ti­ca y due­ña de un inna­to buen humor. Cuan­do en una visi­ta a su médi­co (Patch Darragh) éste com­prue­ba su ele­va­da pre­sión arte­rial, le reco­mien­da bajar 50 libras de las 190 que está pesan­do y suje­tar­se a una estric­ta die­ta para mejo­rar su salud. Preo­cu­pa­da con este diag­nós­ti­co Brit­tany deci­de seguir cur­sos en un gim­na­sio pero debi­do a su ele­va­do cos­to, acep­ta la pro­po­si­ción de Cathe­ri­ne (Michae­la Wat­kins), una veci­na de del­ga­da silue­ta, de ingre­sar a un club de corre­do­res. La tarea de cam­biar las cos­tum­bres don­de la sana ali­men­ta­ción es uno de los ele­men­tos más impor­tan­tes, no resul­ta fácil y menos lo es para quien nun­ca prac­ti­có el depor­te de correr; en esas tra­ve­sías com­par­te la fati­ga y can­san­cio con Seth (Micah Stock), otro joven que tam­bién odia este tipo de ejer­ci­cio pero es cons­cien­te que debe hacerse.

Len­ta­men­te y superan­do algu­nos incon­ve­nien­tes, el denue­do de Brit­tany comien­za a ren­dir sus fru­tos al com­pro­bar cómo su peso va dis­mi­nu­yen­do, lo que le per­mi­te ganar más con­fian­za en sí mis­ma. En con­se­cuen­cia, jun­to con Cathe­ri­ne y Seth ella se pro­po­ne par­ti­ci­par en el impor­tan­te mara­tón de poco más de 40 kiló­me­tros que todos los años tie­ne lugar en Nue­va York. Cla­ro está que para ello es nece­sa­rio lograr un muy buen entre­na­mien­to que con­sis­te en correr 5 kiló­me­tros dia­rios has­ta la fecha en que se rea­li­za­rá la carre­ra pedes­tre de resistencia.

Si bien el tema es intere­san­te, Colaiz­zo demues­tra ser mejor rea­li­za­dor que guio­nis­ta en la medi­da que el libre­to es un tan­to des­igual y cier­ta­men­te pre­de­ci­ble; de todos modos, esta livia­na come­dia se deja ver por la muy bue­na actua­ción de su elen­co. Bell ‑prác­ti­ca­men­te pre­sen­te en todo el rela­to- ofre­ce una des­lum­bran­te actua­ción per­mi­tien­do que su per­so­na­je con­quis­te la total sim­pa­tía del públi­co; según las notas de pren­sa la joven actriz real­men­te per­dió 40 libras duran­te el roda­je. Entre otros acto­res se dis­tin­guen Wat­kins, Stock, Utkarsh Ambud­ka como el inte­rés román­ti­co de Brit­tany, Kate Arring­ton y Lil Rey Howry ani­man­do res­pec­ti­va­men­te a la her­ma­na y cuña­do de la protagonista.
Jor­ge Gutman

Cai­da en Des­gra­cia y Muer­te de un Famo­so Actor

THE DEATH AND LIFE OF JOHN F. DONO­VAN. Cana­dá-Gran Bre­ta­ña, 2018. Un film de Xavier Dolan

Antes de eva­luar al film es nece­sa­rio acla­rar que la edi­ción del mis­mo resul­tó difi­cul­to­sa en la medi­da que insu­mió dos años para que el direc­tor Xavier Dolan que­da­ra final­men­te satis­fe­cho. Sin embar­go es en el mon­ta­je don­de resi­de el gran pro­ble­ma de The Death and Life of John F. Dono­van dada la for­ma poco afor­tu­na­da de la estruc­tu­ra del guión de Dolan escri­to con Jacob Tier­ney; a ello se agre­ga la eli­mi­na­ción de un per­so­na­je impor­tan­te inter­pre­ta­do por Jes­si­ca Chas­tain, con­tri­bu­yen­do a que en la ver­sión final se pre­sen­cie algu­nas situa­cio­nes inve­ro­sí­mi­les y poco cohe­ren­tes que afec­tan la cali­dad de esta película.

La his­to­ria comien­za en 2017 en Pra­ga don­de Audrey Newhou­se (Than­die New­ton), una sagaz y un poco hos­til repor­te­ra del Times, entre­vis­ta al joven actor Rupert Tur­ner (Ben Sch­netzer) con moti­vo de su libro de memo­rias que aca­ba de publi­car­se; en el mis­mo él se refie­re a su perío­do de pre­ado­les­cen­te con espe­cial énfa­sis a una rela­ción epis­to­lar con un famo­so per­so­na­je. Eso moti­va a que el rela­to se sub­di­vi­da en dos par­tes que se van desa­rro­llan­do paralelamente.

Nata­lie Port­man y Jacob Tremblay

Retro­ce­dien­do a 2006, se ve a Rupert de 11 años (Jacob Trem­blay), un chi­co locuaz y muy inte­li­gen­te que vive en Lon­dres con Sam (Nata­lie Port­man) su madre mono­pa­ren­tal; aun­que es un alumno muy aven­ta­ja­do en su escue­la no es muy que­ri­do por sus com­pa­ñe­ros. Lle­van­do una vida soli­ta­ria y en don­de las rela­cio­nes con su madre no son muy flui­das, su vía de esca­pe la encuen­tra en un exi­to­so pro­gra­ma de tele­vi­sión de Esta­dos Uni­dos don­de actúa John F. Dono­van (Kit Haring­ton), un actor ame­ri­cano muy popu­lar a quien ido­la­tra y con el que des­de hace 5 años se car­tea de mane­ra permanente.

En for­ma simul­tá­nea se asis­te a la gran noto­rie­dad alcan­za­da por Dono­van, un hom­bre que apa­ren­te­men­te lo tie­ne todo pero que tor­tu­ra­do de alma no pue­de ser feliz; de orien­ta­ción homo­se­xual, cubre las apa­rien­cias man­te­nien­do un fal­so roman­ce con Amy (Emily Ham­pshi­re) en tan­to que man­tie­ne una rela­ción tran­si­to­ria con su aman­te Will (Chris Zyl­ka); en lo que con­cier­ne estric­ta­men­te a su vida fami­liar se deno­ta el tiran­te víncu­lo con su neu­ró­ti­ca madre Gra­ce (Susan Sarandon).

El gra­ve con­flic­to se pro­du­ce cuan­do las car­tas que Rupert ha reci­bi­do de John le son sus­traí­das de su bol­so esco­lar por los com­pa­ñe­ros de escue­la y al lle­gar a domi­nio públi­co pro­du­cen un gra­ve escán­da­lo; eso aca­rrea la caí­da en des­gra­cia del famo­so actor que final­men­te pro­du­ce su muer­te en cir­cuns­tan­cias misteriosas.

Con­tem­plan­do este melo­dra­ma sur­gen serias dudas sobre su cre­di­bi­li­dad. Para comen­zar, nun­ca se lle­ga a cono­cer el con­te­ni­do de las car­tas y por lo tan­to se igno­ra la cau­sa del escán­da­lo; tam­bién resul­ta pro­ble­má­ti­co supo­ner que a par­tir de los 6 años Rup­pert haya comen­za­do a escri­bir­las y que alguien tan popu­lar como Dono­van haya res­pon­di­do a sus misi­vas duran­te ese lar­go perío­do. No menos cues­tio­na­ble es acep­tar que duran­te el inter­cam­bio de corres­pon­den­cia la madre de Rup­pert haya igno­ra­do por com­ple­to su recep­ción; ¿es que el niño espe­ra­ba todos los días al car­te­ro para reci­bir y ocul­tar las car­tas reci­bi­das? Final­men­te, si todo lo que se sabe de John Dono­van es a tra­vés del rela­to que el adul­to Rup­pert le cuen­ta a la perio­dis­ta, es com­ple­ta­men­te irrea­lis­ta con­ce­bir que el niño pudo haber­se impues­to de los por­me­no­res ínti­mos de su ídolo.

Dejan­do de lado la incon­sis­ten­cia del ende­ble guión y los gra­ves pro­ble­mas de mon­ta­je, se podrá res­ca­tar algu­nos de los temas ya evi­den­cia­dos por Dolan en sus fil­mes pre­ce­den­tes, como el amor-odio de hijos hacia madres domi­nan­tes, la bús­que­da de iden­ti­dad, las ten­sio­nes que sur­gen en torno a la homo­fo­bia, los sue­ños ima­gi­na­rios, como así tam­bién ‑en el pre­sen­te caso- refle­xio­nar sobre el cul­to de la celebridad.

Los aspec­tos favo­ra­bles del film resi­den en las exce­len­tes actua­cio­nes de Trem­blay, Port­man, Saran­don, New­ton y Kathy Bates ‑como la agen­te de Dono­van- quie­nes trans­mi­ten com­ple­ta con­vic­ción a sus roles a pesar de las serias limi­ta­cio­nes del libre­to don­de casi al final apa­re­ce el vete­rano Michael Gam­bon en una esce­na com­ple­ta­men­te extra­ña y fue­ra de con­tex­to. Des­ta­ca­ble es la foto­gra­fía de André Tur­pin como asi­mis­mo la músi­ca de Gabriel Yared. 

En con­clu­sión: el film no es un desas­tre como muchos crí­ti­cos lo han con­si­de­ra­do cuan­do el año pasa­do se dio a cono­cer en el Fes­ti­val de Toron­to, pero lo cier­to es que tam­po­co está logra­do. Por el res­pe­to que Dolan mere­ce como remar­ca­ble rea­li­za­dor es de espe­rar que en sus futu­ros pro­yec­tos pue­da reafir­mar­se como tal apo­yán­do­se en guio­nes más sóli­dos. Jor­ge Gutman

Reme­mo­ra­ción de un Gran­dio­so Musical

FIDD­LER: A MIRA­CLE OF MIRA­CLES. Esta­dos Uni­dos, 2019. Un film escri­to y diri­gi­do por Max Lewkowicz

El docu­men­ta­lis­ta Max Lew­ko­wicz efec­túa una emo­ti­va cró­ni­ca de la géne­sis del gran­dio­so musi­cal A Fidd­ler on the Roof Esta extra­or­di­na­ria obra musi­cal de Jerry Bock y libre­to de Joseph Stein dada a cono­cer en Broad­way el 22 de sep­tiem­bre de 1964 está basa­da en la crea­ción lite­ra­ria Tev­ye el leche­ro del gran escri­tor y humo­ris­ta judío Sho­lem Alei­jem (1859 – 1916).

Una esce­na de FIDD­LER: A MIRA­CLE OF MIRACLES

No obs­tan­te haber trans­cu­rri­do 55 años des­de su estreno, las impli­can­cias polí­ti­cas y socia­les de la pie­za tie­nen amplia reso­nan­cia en la actua­li­dad. Bas­ta­ría com­pa­rar la tris­te expe­rien­cia del humil­de leche­ro y su fami­lia for­za­dos por el régi­men zaris­ta a dejar Ana­tev­ka con el gra­ve pro­ble­ma de los millo­nes de refu­gia­dos obli­ga­dos a aban­do­nar su tie­rra natal o bien si se tie­ne en cuen­ta la retó­ri­ca anti­se­mi­ta y anti-musul­ma­na que des­gra­cia­da­men­te se espar­ce en los dife­ren­tes rin­co­nes del pla­ne­ta. Por esa razón El Vio­li­nis­ta en el Teja­do es por exce­len­cia un entre­te­ni­mien­to popu­lar que ha cau­ti­va­do al mun­do por­que los temas enfo­ca­dos son uni­ver­sa­les y atemporales.

En lugar del empleo de un narra­dor, Lew­ko­wicz pre­fi­rió recu­rrir a entre­vis­tas de quie­nes direc­ta o indi­rec­ta­men­te estu­vie­ron impli­ca­dos en la obra. Es así que uno de los mis­mos es Shel­don Har­nick, el letris­ta de las can­cio­nes, que aún con sus 95 años demues­tra sufi­cien­te ener­gía y entu­sias­mo expli­can­do cómo se gene­ró el espec­tácu­lo. Otros par­ti­ci­pan­tes inclu­yen a Chaim Topol que carac­te­ri­zó a Tev­ye en el film de 1971 diri­gi­do por Nor­man Jewi­son, don­de ambos se mues­tran hila­ran­tes a la vez que emo­cio­na­dos al recor­dar algu­nos momen­tos de su roda­je; Har­vey Fiers­tein, que per­so­ni­fi­có a su pro­ta­go­nis­ta en Broad­way; Aus­tin Pend­le­ton y Joa­na Mer­lin, quie­nes tra­ba­ja­ron en la pro­duc­ción ori­gi­nal tea­tral. La lis­ta igual­men­te inclu­ye al vir­tuo­so vio­li­nis­ta Itzhak Perl­man, el remar­ca­ble com­po­si­tor Stephen Sondheim, el cuen­tis­ta y nove­lis­ta Nathan Englan­der, el actor y can­tan­te Joel Grey, el com­po­si­tor Stephen Sondheim, el perio­dis­ta y humo­ris­ta Cal­vin Tri­llin, quie­nes de una mane­ra u otra se refie­ren al lega­do de esta pie­za enfa­ti­zan­do la rele­van­cia que sigue teniendo.

El docu­men­tal inclu­ye valio­so mate­rial de archi­vo con extrac­tos de las subli­mes can­cio­nes de Jerry Bock y las dan­zas coreo­gra­fia­das por el gran direc­tor y coreó­gra­fo Jero­me Rob­bins que nutren a esta joya musi­cal. Resul­ta difí­cil con­te­ner la emo­ción cuan­do se obser­va mate­rial fíl­mi­co de la pues­ta en esce­na del espec­tácu­lo en pro­duc­cio­nes de paí­ses de cul­tu­ras tan dife­ren­tes como Ucra­nia, Tai­lan­dia o bien Japón can­tan­do en sus res­pec­ti­vas len­guas los temas de esta obra.

En esen­cia, con Fidd­ler: A Mira­cle of Mira­cles Lew­ko­wicz ha logra­do un cáli­do y her­mo­so docu­men­tal home­na­jean­do a los crea­do­res de este excep­cio­nal musical.
Jor­ge Gutman