SPARE MY BONES, COYOTE! Canadá, 2025. Un film de Jonah Malak. 84 minutos. Presentado en el Festival Hot Docs
El llamado “sueño americano” constituye la aspiración de multitud de personas que provenientes de América Latina llevando una vida precaria y sin muchos incentivos creen que Estados Unidos les proveerá un futuro mejor. Es así que migrantes incapaces de obtener la visa de entrada tratan de ingresar al país soñado contratando los servicios de los coyotes; estos son traficantes que les ofrecen facilitarles el propósito a cambio de altas sumas de dinero, aunque sin garantizarles seguridad alguna.
Ese es el tema abordado por el documentalista Jonah Malak quien de manera clara y concisa permite que el espectador se interiorice sobre los problemas que estos migrantes indocumentados atraviesan. Es así que el realizador centra su atención en la abnegada labor realizada por Ely Ortiz Sánchez y su esposa Marisela López de Ortíz, dos mexicanos de origen con residencia americana ubicados en California, a 8 kilómetros de la frontera con México.
Este matrimonio es el fundador del grupo Águilas del Desierto y durante los últimos 12 años junto con varios miembros voluntarios, dedican su jornada a localizar a migrantes quienes habiendo cruzando la frontera de México con Estados Unidos a pie terminan agonizando. Es así que diariamente Ely y Marisela reciben llamadas de familiares de migrantes pidiéndoles su ayuda para tratar de obtener información alguna sobre sus seres queridos, como también se ocupan de recoger sus cadáveres en el caso que hubiesen fallecido para ser retornados a su país de origen. La tarea no es sencilla dado que muchas veces se trata de personas de Guatemala quienes han comprado falsa identificación y por lo tanto se hace difícil ubicarlos.
Ely y Marisela así como los integrantes de la agrupación mencionada no cobran dinero alguno por la humanitaria labor que realizan, valiéndose en gran parte por las donaciones recibidas; en todo caso puede apreciarse el gran peso emocional que implica para el matrimonio Ortiz la realización de esta exhaustiva tarea.
El panorama expuesto es a todas luces abrumador con 3 millones de migrantes que son aprehendidos anualmente, en tanto que los cuerpos sin vida en medio del desierto fronterizo configuran un cementerio gigante.
Sin solución alguna para el problema expuesto y quedando interrogantes sobre cuántas más personas van a cruzar la frontera con el alto riesgo de perecer o de ser arrestados, lo cierto es que Ely y Marisela seguirán sin claudicar tratando no solo de rescatar cadáveres sino también de salvar las vidas de los desfallecientes migrantes del desierto. Jorge Gutman