El Valor de Anó­ni­mos Héroes

ONLY THE BRA­VE. Esta­dos Uni­dos, 2017. Un film de Joseph Kosinski

Un film basa­do en un dra­ma acon­te­ci­do real­men­te es lo que se apre­cia en Only the Bra­ve, un rela­to que abor­da a los inte­gran­tes de Gra­ni­te Moun­tain Hotshots, una uni­dad del cuer­po de bom­be­ros de Pres­cott en el esta­do de Ari­zo­na des­ti­na­da a aca­llar los incen­dios forestales.

Josh Bro­lin

El direc­tor Joseph Kosins­ki basa­do en el guión de Ken Nolan y Eric Warren Sin­ger pre­sen­ta a Eric Marsh (Josh Bro­lin) quien super­vi­sa­do por su cole­ga Dua­ne (Jeff Brid­ges) lide­ra una escua­dra eli­te de bom­be­ros des­ti­na­da a com­ba­tir los des­co­mu­na­les incen­dios fores­ta­les de Ari­zo­na que sue­len pro­du­cir­se con más fre­cuen­cia duran­te el perío­do esti­val. Como jefe, Eric posee la sufi­cien­te pre­sen­cia para impri­mir la auto­ri­dad nece­sa­ria como así tam­bién brin­dar apo­yo y afec­to al gru­po de jóve­nes que inte­gran su equipo.

La mayor par­te del rela­to mues­tra las téc­ni­cas emplea­das por la uni­dad para tra­tar de con­te­ner los incen­dios o bien cuan­do real­men­te se pro­du­cen, a la vez que ilus­tra el gran espí­ri­tu de cama­ra­de­ría exis­ten­te entre sus miem­bros. La mane­ra en que el tra­ba­jo pro­fe­sio­nal se des­en­vuel­ve con sus vidas per­so­na­les que­da mani­fes­ta­da en dos de sus per­so­na­jes. Uno de ellos es Eric quien feliz­men­te casa­do con Aman­da (Jen­ni­fer Con­nelly), una vete­ri­na­ria y entre­na­do­ra de caba­llos, encuen­tra un solo obs­tácu­lo en la rela­ción con­yu­gal: ella desea for­mar una fami­lia, en tan­to que Eric com­ple­ta­men­te dedi­ca­do a su pro­fe­sión no está intere­sa­do en tener hijos. El otro per­so­na­je es el del joven Bren­dan McDo­nough (Miles Teller) quien recien­te­men­te reclu­ta­do logra recom­po­ner su vida al haber deja­do su adic­ción a la dro­ga; sien­do un novel papá lle­ga un momen­to en que pien­sa seria­men­te en dejar la peli­gro­sa pro­fe­sión para estar al lado de su familia.

Imbui­do de bue­nas inten­cio­nes, con más de dos horas de metra­je, el rela­to se resien­te en su aspec­to narra­ti­vo; ade­más de que toma su buen tiem­po en des­pe­gar, las esce­nas en que se ensa­yan o com­ba­ten incen­dios se vuel­ven extre­ma­da­men­te repe­ti­ti­vas resin­tien­do de este modo su rit­mo; con un mon­ta­je más acer­ta­do, eli­mi­nan­do media hora de dura­ción, la his­to­ria habría logra­do mayor dina­mis­mo sin que su pro­pó­si­to que­da­se afectado.

Que­da como balan­ce un docu­dra­ma visual­men­te apre­cia­ble don­de el mayor impac­to emo­cio­nal se expe­ri­men­ta en las esce­nas fina­les enfo­can­do la tra­ge­dia acae­ci­da en el devas­ta­dor incen­dio de Yar­nell Hill ocu­rri­do el 28 de junio de 2013 don­de murie­ron 19 de los 20 bom­be­ros de Hotshots. De este modo, el film rin­de un mere­ci­do tri­bu­to al valor y sacri­fi­cio de hom­bres heroi­cos que en el ejer­ci­cio de su pro­fe­sión per­ma­nen­te­men­te arries­gan sus vidas para sal­va­guar­dar la de la comu­ni­dad. Jor­ge Gutman