ELYSIUM. Estados Unidos, 2013. Un film escrito y dirigido por Neill Blomkamp
Así como en District 9, el director Neill Blomkamp brindó una fantasía de acción sobre la segregación de extraterrestres que llegan a la tierra y son confinados a vivir separadamente de los humanos, en Elysium aborda algo parecido aunque no exactamente igual. En todo caso, lo que ofrece este film es otro relato de acción y violencia bajo la pátina de un supuesto documento social; con grandes ambiciones de aparecer como una historia de gran envergadura, esta película de ciencia ficción es otra más que se inscribe en la lista de filmes insustanciales sin innovar en la materia.
La acción tiene lugar en Los Ángeles 2154 donde se contempla una ciudad prácticamente en ruinas y devastada, sin saber la causa que generó esa situación. Ya hace 6 décadas que la población económicamente privilegiada ha dejado la Tierra para vivir en una estación espacial de nombre Elysium. Se trata de un lugar de ensueño donde los ricos gozan del buen tiempo, agradable vegetación y de un impecable sistema de salud tan avanzado donde el cáncer y cualquier otro tipo de enfermedad peligrosa es perfectamente curable; en otras palabras, la vida transcurre plácidamente.
En contraste con Elysium, la clase desposeída que habita en la Tierra, vigilada por policías robots, debe conformarse con vivir en la miseria y aceptar las escasas oportunidades de empleo existentes con magras remuneraciones y sin posibilidades de un futuro mejor. Uno de sus residentes es Max (Matt Damon), un ex convicto, que al ser objeto de una radiación en la fábrica donde trabaja, corre peligro de muerte. Con una deplorable atención sanitaria existente en la Tierra, su única posibilidad de salvación es franquear la barrera existente para llegar a la estación espacial a fin de ser tratado convenientemente. Sin embargo, hay varios obstáculos de por medio teniendo en cuenta el celo que pone en su trabajo la Secretaria de Defensa de Elysium (Jodie Foster) para evitar cualquier tipo de inmigración ilegal, sobre todo si proviene de los sectores desposeídos: para cumplir sus fines se vale de su psicótico lugarteniente Kruger (Sharito Copley) quien debe impedir el ingreso de Max aunque tenga que matarlo si fuese necesario.
La premisa inicial de considerar temas vinculados con la desigualdad de clases contraponiendo la riqueza exorbitante de unos con la extrema pobreza de otros, así como el impedimento de indeseables inmigrantes que pudieran alterar la tranquilidad de los agraciados económicamente, en principio resulta interesante; sin embargo la forma poco sutil de exponer el problema así como la superficialidad de su tratamiento conduce a que las expectativas generadas queden rápidamente diluidas, dando como resultado un film que poco se diferencia de los típicos productos masivos que se suelen ver en el período estival, capaces de generar un gran éxito de taquilla..
El mensaje abogando por un sistema de salud universal y la eliminación de fronteras migratorias para que todo el mundo pueda aspirar a un satisfactorio nivel de bienestar, gozar de los adelantos tecnológicos y extender su esperanza de vida, es simplemente el pretexto para ofrecer un relato de aventuras de fantasía donde lo que importa son las luchas o batallas a muerte, las explosiones y toda la parafernalia que caracteriza a los filmes de este tipo. Fuera de eso, hay algunos momentos de intimidad reservados para alargar el metraje; eso está vinculado al encuentro que Max tiene con una mujer (Alice Braga) que fuera su gran amiga de la niñez y que ahora trata de revivir románticamente el lazo de antaño.
A nivel interpretativo no hay nada remarcable como tampoco reprochable. En los renglones técnicos, la fotografía, los efectos especiales y diseños de producción están muy bien conjugados para ofrecer un convincente reflejo de nuestro planeta desmantelado y de la belleza paradisíaca de Elysium.
Conclusión: Un film de ciencia ficción con convincentes efectos visuales al servicio de un relato que aparenta tener sustancia pero que es una mera excusa para ofrecer una considerable dosis de acción y violencia capaz de contentar al público masivo. Jorge Gutman