UN AMOUR IMPOSSIBLE. Francia, 2018. Un film de Catherine Corsini
Basada en la novela homónima autobiográfica de Christine Angot publicada en 2015, la directora Catherine Corsini relata en Un Amour Impossible la dolorosa experiencia vivida por la autora durante su adolescencia a través del vínculo mantenido con su progenitor. Es ella misma quien efectúa la narración con la voz en off.
El guión de Corsini y Laurette Polmanss sitúa la acción en Francia durante un periodo de cuatro décadas, presentando a Rachel (Virginie Efira) en los últimos años de la década del 50. Ella es una joven proveniente de una familia de condición social modesta que trabaja como oficinista en la pequeña ciudad Châteauroux. Asistiendo a un baile local conoce a Philippe (Niels Schneider), un apuesto traductor parisino bien cultivado perteneciente a una familia burguesa de París que logra atraerla. Prontamente surge entre ellos un apasionado amor donde desde un principio él le hace saber que es una persona deseosa de gozar la más amplia libertad sin que ningún compromiso sentimental lo retenga y por lo tanto totalmente reacio al matrimonio. Cuando Philippe concluye su tarea retorna a Paris y al poco tiempo su enamorada le comunica que está embarazada; sin adjudicar trascendencia a la noticia, además de rehusar a cualquier responsabilidad paternal tampoco acepta ofrecer su apellido a la criatura que se está gestando. Cuando Chantal nace, Rachel como madre monoparental asume con valor y determinación la tarea de criar y educarla a pesar de todas las dificultades que debe atravesar, entre otras, la del condicionamiento social de la época.
A medida que pasan los años Philippe retorna esporádicamente al pueblo y Rachel lo acepta intimando cada vez con él como si nada hubiera pasado; más aún, él demuestra poco interés por su hijita pequeña (Ambre Hasaj), como tampoco lo hace cuando la niña va creciendo (Sasha Allessandri-Torres Garcia). La desfachatez de Philippe mezclada de indudable sadismo alcanza un inconcebible nivel cuando en uno de esos viajes él le confiesa a Rachel que se ha casado con una rica mujer alemana de su misma condición social.
El momento crítico del relato se produce cuando después de 8 años de ausencia, Philippe regresa una vez más para descubrir que su hija es ya una adolescente (Estelle Lescure); por primera vez se muestra interesado por ella, acepta brindarle su apellido al propio tiempo que mantiene una estrecha relación afectiva que finalmente repercutirá negativamente en la vida de Chantal al dejarla emocionalmente traumatizada. La experiencia vivida con su padre hará que la joven guarde distancia con su madre hasta que finalmente como mujer adulta (Jehnny Beth) Chantal ‑el alter ego de la autora del libro- se reconciliará con Rachel reconociendo todo el amor y devoción que ella le brindó durante su vida.
Este melodrama está muy bien realizado por Corsini, a pesar de que resulta difícil comprender la bajísima autoestima de Rachel al haber tolerado durante largo espacio de tiempo al despreciable Philippe sin haberlo rechazado en ocasión de sus fantasmagóricas visitas. En la interpretación se destaca netamente Virginie Efira como la estoica madre de Christine Angot; Por su parte Niels Schneider logra transmitir la transformación de un agradable joven narcisista en un cínico, perverso y cruel manipulador.
Aunque de carácter formal, la objeción que se puede hacer a este relato es el descuido del maquillaje en la medida que los rostros de Efira como los de Schneider no denotan el envejecimiento natural que se produce a través de los años. Jorge Gutman