La Pin­to­ra y su Modelo

POR­TRAIT DE LA JEU­NE FILLE EN FEU /. POR­TRAIT OF A LADY ON FIRE Fran­cia, 2019. Un film escri­to y diri­gi­do por Celi­na Sciamma

Con un inge­nio­so y ori­gi­nal libre­to la cineas­ta Celi­na Sciam­ma ofre­ce en Por­trait de la jeu­ne fille en feu un cau­ti­van­te rela­to sobre la rela­ción exis­ten­te entre dos jóve­nes mujeres.

Adè­le Hae­nel y Noé­mie Merlant

La rea­li­za­do­ra que en Can­nes 2019 fue dis­tin­gui­da con el pre­mio al mejor guión ubi­ca la acción en la región fran­ce­sa de Bre­ta­ña en 1770, don­de la pin­to­ra Marian­ne (Noé­mie Mer­lant) es con­tra­ta­da por una Con­de­sa (Vale­ria Golino) para que pin­te a su hija Heloï­se (Adè­le Hae­nel), recién sali­da del con­ven­to; el pro­pó­si­to es enviar el tra­ba­jo rea­li­za­do a quien será su futu­ro espo­so, un hom­bre de bue­na con­di­ción eco­nó­mi­ca que resi­de en Milán. Como Heloï­se se nie­ga a ser retra­ta­da des­pués del esfuer­zo inten­ta­do por otros artis­tas pre­ce­den­tes, Marian­ne debe adop­tar el rol de dama de com­pa­ñía para que estu­dian­do aten­ta­men­te sus fac­cio­nes pue­da lue­go repro­du­cir­las en la tela sin que la joven se entere.

Si bien al prin­ci­pio el víncu­lo exis­ten­te entre la artis­ta y su mode­lo es obje­to de cier­ta ten­sión, a medi­da que trans­cu­rren los encuen­tros la situa­ción tien­de a alte­rar­se a par­tir del momen­to en que Héloi­se acep­ta posar libre­men­te para Marian­ne. A tra­vés de la fre­cuen­cia dia­ria, entre ambas se pro­du­ce una curio­sa sim­bio­sis que con­du­ci­rá a una apa­sio­na­da rela­ción lésbica.

Sutil y deli­ca­da en su rea­li­za­ción, Sciam­ma no solo con­si­de­ra el tema del amor sáfi­co, sino que tam­bién enca­ra el del abor­to clan­des­tino a tra­vés de Sophie (Luà­na Baj­ra­mi), la emplea­da domés­ti­ca en esta­do de emba­ra­zo, quien como tes­ti­go de lo que acon­te­ce en la resi­den­cia for­ma par­te del ínti­mo círcu­lo de Héloi­se y Marian­ne. Nada hace pre­su­mir cuál será el des­tino que aguar­da a las pro­ta­go­nis­tas de esta his­to­ria pero en todo caso lo que más se des­ta­ca es la nota­ble carac­te­ri­za­ción de Hae­nel y Mer­lant logran­do una inme­jo­ra­ble quí­mi­ca en la com­po­si­ción de sus per­so­na­jes. Esen­cial­men­te el film cons­ti­tu­ye un buen apor­te a la temá­ti­ca femi­nis­ta, cada vez más fre­cuen­te en el cine actual. Jor­ge Gutman