El Poder de la Música

BIG GIANT WAVE / COM­ME UNE VAGUE. Cana­dá, 2020. Un film de Marie-Julie Dallaire

El efec­to musi­cal tra­vés de sus dife­ren­tes mani­fes­ta­cio­nes es abor­da­do por la direc­to­ra Marie-Julie Dallai­re en esta muy bue­na obra de ensayo.

Tenien­do en cuen­ta que la músi­ca es el arte de com­bi­nar los soni­dos, la direc­to­ra se sin­tió intere­sa­da en inves­ti­gar cómo sus ecos pro­ve­nien­tes de los ins­tru­men­tos musi­ca­les y los ema­na­dos de otras fuen­tes gra­vi­tan en el ser humano. Para ello reali­zó un via­je que la tras­la­dó des­de Cana­dá hacia algu­nos paí­ses de Euro­pa, Méxi­co y el oes­te ame­ri­cano para entrar en con­tac­to con emi­nen­tes cien­tí­fi­cos y artis­tas quie­nes a tra­vés de sus expe­rien­cias ofre­cen impor­tan­tes comen­ta­rios sobre este tópico.

Una esce­na de BIG GIANT WAVE

Entre las diver­sas per­so­na­li­da­des par­ti­ci­pan­tes se halla la artis­ta cana­dien­se Tia­na Malo­ne que en su carác­ter de tera­peu­ta musi­cal des­ta­ca el impac­to del soni­do musi­cal como ele­men­to que influ­ye bene­fi­cio­sa­men­te en la salud psi­co­ló­gi­ca de la per­so­na. No menos impor­tan­te es la inter­ven­ción del pres­ti­gio­so eco­lo­gis­ta acús­ti­co cali­for­niano Gor­don Hem­pton quien como apa­sio­na­do colec­cio­nis­ta de los soni­dos enfa­ti­za la belle­za de los mis­mos que pro­vie­nen de los bos­ques y del mar. El docu­men­tal per­mi­te cono­cer la noble y con­mo­ve­do­ra tarea del vene­zo­lano Ron Davis Álva­rez; este pres­ti­gio­so vio­li­nis­ta que es el direc­tor artís­ti­co de El Sis­te­ma en Sue­cia y fun­da­dor de la Dream Orches­tra, ade­más es pro­fe­sor de niños refu­gia­dos pro­ve­nien­tes del Medio Orien­te y Áfri­ca a quie­nes el poder de la músi­ca les ha cam­bia­do radi­cal­men­te sus vidas. Igual­men­te emo­ti­vo son las con­fi­den­cias ver­ti­das por el vio­li­nis­ta Ezra Azmon quien ofre­ce su músi­ca en las calles de Cana­dá, así como los encuen­tros con el can­tan­te y com­po­si­tor cana­dien­se Patrick Watson, el com­po­si­tor ame­ri­cano Osun­la­de y el vio­lon­che­lis­ta Stépha­ne Tétrault quien des­cri­be la magia que se des­pren­de de su ins­tru­men­to Stradivarius.

La muy bue­na con­cep­ción de Dallai­re ha sido plas­ma­da en un irre­pro­cha­ble mon­ta­je de Louis-Mar­tin Para­dis. A todo ello, es impor­tan­te resal­tar el inva­lua­ble apor­te brin­da­do por la foto­gra­fía en blan­co y negro de Tobie Marier-Robi­tai­lle y Josée Des­haies que visual­men­te se com­ple­men­ta con el vigor del soni­do emer­gen­te de esta inusual expe­rien­cia intelectual.

Para con­cluir este muy buen docu­men­tal se bene­fi­cia de los extrac­tos musi­ca­les de Los Pla­ne­tas de Gus­tav Holst, el Ada­gio Para Cuer­das de Samuel Bar­ber, y la Ele­gía de Gabriel Fau­ré. Jor­ge Gutman