UN TRIOMPHE. Francia, 2020. Un film escrito y dirigido por Ëmmanuel Courcol. 105 minutos
Después de haber dejado una favorable impresión con su ópera prima Cessez le feu (2016), el realizador y actor Émmanuel Courcol volvió a ubicarse detrás de la cámara para relatar un drama carcelario.
Si bien lo que se relata es una ficción, el guión del realizador escrito con Khaled Amara y Thierry de Carbonnières está basado en un hecho verídico acontecido en Suecia en 1986 con los presidiarios de la prisión de alta seguridad de Kumla.
La acción transcurre en Francia donde Étienne (Kad Merad), un veterano director teatral y actor que en los últimos tiempos ha caido en el olvido encuentra la oportunidad para reafirmar su talento al aceptar un ambicioso proyecto que le es propuesto; el mismo consiste en ofrecer lecciones de teatro en una cárcel donde se encuentran presos que han cometido delitos de diferente naturaleza. El propósito es el de ensayar durante un período de 6 meses con cinco de los detenidos la obra “Esperando a Godot” de Samuel Beckett.
Durante la primera mitad del metraje la narración enfoca la relación mantenida de Étienne con los internos seleccionados: Jordan (Pierre Lottin), Patrick (David Ayala), Kamel (Sofian Khammes), Alex (Lamine Cissokho) y Moussa (Wabinlé Nabié). La tarea del instructor no es nada sencilla en sus comienzos al tener que enfrentar a prisioneros de diferente personalidad y lograr un buen entendimiento a fin de que ellos puedan desempeñar sus roles de la mejor manera posible; al propio tiempo Étienne mantiene un permanente trato fluido con la directora del penal (Marina Hands) para conseguir una extensión en los horarios de ensayo y sobre todo para que cuando los novatos actores estén completamente preparados puedan obtener el permiso de salir de la presión para representar la obra en un escenario teatral.
Cuando los ensayos finalizan y los reclusos ya están entrenados para actuar, ellos son transportados al Teatro de la Croix-Rousse de Lyon donde obtienen un gran éxito por parte del público asistente; eso conlleva a seguir representando la pieza de Beckett en otros escenarios con igual suceso. Cuando el grupo es invitado a actuar en el emblemático Teatro Odeón de París, la historia conduce a un desenlace inesperado sumamente conmovedor.
La meticulosa narración empleada por Courcol permite que se pueda apreciar una comedia de notable contenido humano donde nada ha quedado librado al azar. Previo al rodaje, el director visitó el centro correccional de Meaux Chauconin donde observó atentamente lo que acontece en su interior; por lo tanto, la reproducción ambiental obtenida alcanza un satisfactorio nivel de autenticidad.
El realizador contó con un estupendo elenco en donde trasciende la extraordinaria actuación del veterano Merad animando al divorciado y venido a menos individuo que encuentra un nuevo impulso a su vida a través de la pasión teatral en el trabajo que realiza con los reclusos. Meritoria es la tarea de los poco conocidos actores que han asumido los roles de los convictos, actuando con energía y entusiasmo; la escena en que salen por primera vez al exterior de la prisión es muy emotiva mostrando la enorme alegría que sienten al dejar la oscuridad carcelaria para gozar de la limitada libertad temporal.
En resumen, Un Triomphe es un film entretenido y sobre todo emotivo demostrando la manera en que el teatro como expresión artística puede reivindicar y enaltecer al ser humano. Jorge Gutman