Crónica de Jorge Gutman
ELIZABETH: A PORTRAIT IN PARTS. Gran Bretaña, 2021. Un film de Roger Michell. 89 minutos
El realizador Roger Michell, fallecido en septiembre de 2021 poco tiempo después de haber concluido el rodaje de Elizabeth ofrece en su trabajo póstumo un homenaje a la Reina Elizabeth II. A través de su personal enfoque estructurado como un collage efectúa un retrato en fragmentos tratando de humanizar a la legendaria monarca que acaba de cumplir 96 años y es la soberana con mayor antigüedad en el trono. Este documental basado exclusivamente en material de archivos resulta oportuno teniendo en cuenta que en los primeros días de junio de este año Gran Bretaña festejará el Jubileo de Platino conmemorando los 70 años de su ascensión al trono.
Con la edición de Joanna Crickmay, el documental no sigue un orden cronológico sino que a manera de esbozos o partes sueltas que van y vienen a través del tiempo va reflejando facetas de la monarca a lo largo de su existencia.
Así en el primero de los segmentos titulado “El discurso de la Reina” se la contempla en uno de sus primeros mensajes navideños transmitidos por la radio. En el siguiente denominado “Ma’am” se destaca que la persona que es introducida a un encuentro con la reina en el primer saludo debe dirigirse a ella diciendo “Su Majestad” para posteriormente hacerlo con “ma’am” (apócope de madame); precisamente esas son las indicaciones suministradas a Lee Kuan Yew, primer ministro de Singapur desde 1959 hasta 1990, en su visita a la soberana. En el capítulo “In the Saddle” se asiste al placer que ella experimenta en el deporte de la equitación como asimismo su afición de asistir a las carreras de caballo.
De manera salpicada se pasa revista a episodios de su infancia, su boda con el príncipe Philip, el funeral de su padre el rey George VI en febrero de 1952, así como su coronación del 2 de junio de 1953 portando la pesada corona de diamantes sobre su cabeza. Obviamente no faltan los numerosos viajes emprendidos al exterior como los realizados a Alemania a manera de reconciliación por lo acontecido durante la Segunda Guerra, como así también su visita a Corea del Sur en 1985; asimismo se destaca sus reuniones con varios de los primeros ministros que gobernaron a lo largo de sus 7 décadas de reinado y sus encuentros con jefes de gobierno.
Reflejando algunos aspectos dramáticos, el capítulo “Horribilis” alude al funesto incendio que en 1992 destruyó parte del Castillo de Windsor, amenazando el valioso tesoro pictórico cobijado en su interior y cómo ese desafortunado incidente la entristeció considerablemente.
En el aspecto familiar, el documental ilustra el amor hacia sus hijos, nietos y la romántica historia amorosa con su marido. Asimismo también destaca la presencia de la princesa Diana; en tal sentido, cuando se produjo su muerte, la Reina se pronunció elogiosamente sobre su persona días después de su fallecimiento tras las críticas que emergieron por no haberse pronunciado inmediatamente después del deceso.
Mitchell destaca a Elizabeth como una celebridad que es adorada por multitudes y a quien ella les saluda con una afable sonrisa.. Entre sus admiradores se halla el ex Beatle Paul McCartney quien en un clip cómo admiraba a la reina en su etapa adolescente. Interesante es ver cómo ella se convertía en la principal atracción cuando asistía a premieres de filmes, superando en popularidad a super divas del séptimo arte como lo fueron Marilyn Monroe y Sofía Loren, entre otras. Y a propósito de estrellas del cine, el director efectúa comparaciones entre la soberana y Audrey Hepburn y Elizabeth Taylor incluyendo rápidos extractos de Roman Holiday (1953) y Cleopatra (1963).
Sin que exista una precisa narrativa, el documental no agrega mucho más de lo que ya se ha visto en oportunidades anteriores a través del cine, teatro y televisión incluyendo entre otros ejemplos el excelente film The Queen (2006) de Stephen Frears con la remarcable actuación de Helen Miren así como la extraordinaria serie The Crown donde en su cuarta temporada Olivia Colman anima magníficamente a la Elizabeth de edad madura. Con todo, este documental además de añadir escenas humorísticas de programas televisivos y la introducción de dibujos animados representando a su majestad, el director deseó reflejar a un ser humano que con resiliencia y estoicismo dedicó su vida entera actuando como el símbolo más importante del Reino Unido a fin de mantener la unidad y estabilidad del mismo.
Como nota adicional, varios de los clips exhibidos van acompañados de agradabilísimos motivos musicales incluyendo entre otros, Let me entertain you, Mona Lisa, Cheek to Cheek, Our House y La Vie en Rose.
Como un evento especial este documental será presentado el 20, 24, 25 y 28 de Mayo en varias salas de Cineplex.