BROKER. Corea del Sur, 2022. Un film escrito y dirigido por Hirokazu Kore-eda- 130 minutos
El director japonés Hirokazu Kore-eda deja su tierra natal para filmar por primera vez en Corea del Sur enfocando un tema que le es caro como el de la familia a través de sus diversas facetas. En su narración aborda asimismo varios tópicos subyacentes, donde el más relevante es el de la infancia abandonada que abre el camino para su discusión una vez finalizada la proyección de Broker.
En un guión que le pertenece el realizador ubica la acción en Busán y en la primera escena que transcurre en una noche tormentosa se ve a So-young (Lee Ji-eun), una madre que deja a su bebe en la zona exterior de una iglesia; prontamente la jefa policial Su-Jin (Doona Bae) y su colega Dong-soo (Gang Dong-won); observando la maniobra recogen a la criatura para ubicarla en el baby box que se halla próximo al lugar de la iglesia. Al poco tiempo Sang-hyun (Song Kang-ho) y Dong-soo (Gang Dong-won), dos pillos traficantes de criaturas recién nacidas, recogen al bebé con el propósito de venderlo a padres adoptivos y de ese modo usufructuar en dicha transacción.
Partiendo de la premisa que antecede, la historia comienza a complicarse cuando So-young regresa para buscar a su hijito y se las tiene que ver con estos delictivos brokers en donde de inmediato se une a ellos conviniendo que ella les acompañará en la búsqueda de la potencial pareja adoptiva y que cobrará la mitad del beneficio obtenido en la venta realizada. A partir de allí el trío inicia en un miniván un viaje en la carretera en tanto que las detectives les están pisando los talones para descubrirlos infraganti.
En esa suerte de road movie que va adquiriendo el relato se añade al grupo un simpático niño que ha escapado de un orfanato; así, a lo largo de ese viaje no exento de tensiones que incluye paradas en las ciudades y pueblo del país, los viajeros van forjando un significativo lazo de apoyo para terminar configurando una familia sustituta o más bien disfuncional, reemplazando de ese modo al tradicional núcleo biológico.
Ciertamente Kore-eda siente afecto por esta galería de personajes sin que esto implique que apruebe su conducta; en cambio deja en claro secretos personales del pasado de cada uno de ellos para explicar el comportamiento adoptado; de tal modo, los truhanes traficantes demuestran su sentimiento humano y buen corazón frente a las circunstancias que enfrentan así como la madre soltera que prefirió no abortar puede llegar a una situación límite debido a la pobreza y miseria imperante. Enfocando la exclusión de seres marginados en un mundo impiadoso, el director ofrece una atractiva historia de mágico realismo que sin manipulación alguna apela a recursos genuinos que generan emoción. Jorge Gutman