ANNIE COLÈRE Francia, 2022. Un film de Blandine Lenoir. 119 minutos.
El tema de la emancipación de la mujer con especial referencia al derecho de abortar es lo que considera la cineasta francesa Blandine Lenoir en Annie Colère en un guión que le pertenece escrito con Axelle Ropert.
El film centra su atención en la labor emprendida por el Movimiento por la Libertad del Aborto y de la Contracepción (MLAC) creado en Francia en 1973. Teniendo en consideración el caso de innumerables mujeres que anualmente han muerto por abortos clandestinos, este movimiento se caracterizó por la valentía, audacia y firme determinación de ayudar gratuitamente a mujeres sin discriminación de raza, religión o cualquiera otra diferenciación para que pudieran interrumpir su embarazo.
Inspirado en reales eventos, el guión se desarrolla en una ciudad de Francia en 1974 cuando en ese entonces el aborto es aún ilegal. El personaje protagónico es Annie (Laure Calamy), una trabajadora en una fábrica de colchones que está casada y es madre de una hija de 16 años y de un hijo de 9 años. Al haber quedado accidentalmente embarazada y no deseando tener un tercer hijo, con el consentimiento de su marido (Yannick Choirat), decide acudir a los servicios de MLAC a fin de proceder a un aborto. Allí, al igual que otras mujeres de similar condición, es acogida cálidamente por Monique (Rosemary Standley) y Hélène (Zita Hanrot), quienes le explican cómo el aborto le será practicado a través de un método de aspiración poco doloroso; asimismo también interviene el doctor Chevals (Eric Caravaca). Después que la intervención le ha sido exitosamente realizada por el joven médico Jean (Damien Chapelle), Annie encuentra un nuevo sentido a su vida.
Impresionada por la gran solidaridad femenina en el seno de la asociación, el encuentro con sus militantes motiva a que ella no prosiga con su trabajo habitual a fin de integrarse por completo a las actividades del organismo. Eso implica que deje en segundo plano sus obligaciones hogareñas, que llegado a un cierto punto produce fricciones en su relación conyugal, a pesar de que su esposo comprenda la acción por ella emprendida.
La loable acción de MLAC salvaguardando la voluntad de la mujer para abortar si lo cree necesario, constituye uno de los factores que unido a las manifestaciones y protestas llevadas a cabo en las calles de Francia han influido para que la ministra de Salud Pública Simone Veil lograra la promulgación de la ley que en 1975 despenalizó el aborto en Francia.
Dentro de un relato bien realizado e interpretado por un calificado elenco en donde resalta la genuina caracterización que efectúa Calamy en el personaje central, el film adolece de cierta lentitud; además es un tanto discutible hasta qué punto resulta permisible que Annie, no siendo médica ni enfermera, pueda practicar abortos a otras mujeres.
Es importante tener en cuenta que el tema de este film ha sido magníficamente abordado en los documentales Que Sea Ley (2019) de Juan Solanas y en Simone, Le Voyage du Siècle (2021) de Olivier Dahan, como asimismo en el de ficción L’événement (2021) de Audrey Diwan basado en la novela autobiográfica de Annie Arnoux. Aunque sin agregar algo nuevo a lo ya conocido, el mérito de Annie Colère radica en mantener en estado de alerta la lucha desplegada para respetar y conservar la legítima libertad que asiste a la mujer en decidir lo que hacer con su cuerpo; lamentablemente, ese imprescindible derecho femenino aún no es permisible en varias regiones del mundo. Jorge Gutman