AS BESTAS. España-Francia, 2022. Un film de Rodrigo Sorogoyen. 137 minutos
Teniendo en cuenta que As Bestas es un óptimo drama psicológico no sorprende el haber sido distinguido con varios premios en la ceremonia de los Goya de España, incluyendo entre otros el de mejor film, mejor director (Rodrigo Sorogoyen), mejor actor (Denis Ménochet) y mejor actor de reparto (Luis Zahera); igualmente obtuvo el premio Cesar a la mejor película extranjera de Francia de 2022.
La película está basada en un hecho real acaecido en 2010 en Madrid aunque el guión del cineasta español compartido con Isabel Peña traslada la acción a una aldea rural de Galicia. Procedentes de Francia llegaron Antoine Denis (Denis Ménochet) con su mujer Olga (Marina Fois) quienes compraron una parcela de tierra, iniciando una nueva vida dedicada a la actividad agrícola; al propio tiempo Antoine se dedica a rehabilitar viejas casonas aledañas que se encuentran abandonadas y en ruinosas condiciones.
La vida normal del muy unido matrimonio no encuentra positivo eco en algunos vecinos de la zona quienes les guardan cierto recelo y eso se evidencia con los clientes del bar local al que suele acudir Antoine. El nudo dramático del relato se produce cuando el aldeano Xan (Luis Zahera) junto con su hermano Lorenzo (Diego Anido) quienes con su madre (Luisa Merelas) han residido en esa aldea toda una vida en condiciones humildes, desean obtener las ventajas pecuniarias ofrecidas por una empresa extranjera para instalar turbinas de viento que generarán energía eléctrica; es así que Xan incita a Antoine a que venda su propiedad a dicha compañía, sin lograr su propósito. Ese hecho motiva a que Xan comience a acosar agresivamente a Antoine e incluso a contaminar su cosecha. La inusitada tensión llega a un nivel máximo cuando la ferocidad implacable de Xan conduce a una situación irreparable en donde se denota la implacable bestialidad que en casos límites puede manifestarse en el ser humano.
Sin entrar a revelar lo que acontece a posteriori se puede anticipar que en el último tercio el dramático relato adquiere un giro diferente en donde cobra protagonismo la devota y querida esposa de Antoine así como la participación de su joven hija Marie (Marie Colomb).
Claramente Sorogoyen deja planteadas dos visiones de vida diferentes. Por un lado la de los extranjeros que llegan al lugar para trabajar en una noble actividad a fin de procurar un mejor porvenir y por el otro, la de los lugareños que viviendo en condiciones de pobreza quieren escapar de la miseria obteniendo el dinero que les ofrecen las poderosas corporaciones.
El realizador ofrece una película muy ambiciosa que mantiene a la audiencia en permanente vilo. La remarcable calidad de este thriller que adquiere características propias de un western reside en la excelente puesta escénica de Sorogoyen apelando a un lenguaje cinematográfico de remarcable nivel. A ello se agrega la excelencia del guión por la lograda descripción de los personajes como así también reflejando la xenofobia que puede imperar en regiones aisladas del mundo moderno. En cuanto a su calificado elenco cabe destacar las notables caracterizaciones de Denis Ménochet, Luis Zahera y sobre todo la de Marina Fois componiendo remarcablemente a una mujer de temple procurando que la justicia se imponga.
En esencia, este film constituye una magnífica lección de cine a la vez que ratifica a Sorogoyen como uno de los más importantes realizadores de Europa. Jorge Gutman