LA ÚLTIMA PELÍCULA. India, 2022. Un film escrito y dirigido por Pan Nalin. 110 minutos
Aunque el cine que proviene de India ha sido popularizado por los filmes de Bollywood, sin embargo su cinematografía ha ofrecido muchas obras artísticas como las apreciadas en los trabajos ofrecidos por el gran cineasta Satyajit Ray a mediados del siglo pasado. Eso viene al caso porque de tanto en tanto y al margen de los festivales internacionales, es posible apreciar en la cartelera de los cines un film de notable calidad, como es el caso de La Última Película del realizador indio Pan Nalin.
Habiendo sido inspirado por sus recuerdos de infancia, en un guión que le pertenece el realizador relata la emotiva historia de Samay (Bhavin Rabari), un niño de 9 años viviendo con su humilde familia en la aldea de Chalala; en ese lugar ubicado cerca de la estación ferroviaria, su padre tiene un kiosco donde vende té cuando el tren allí se detiene por algunos minutos. En una salida al pueblo cercano que efectúa con los suyos para ver una película religiosa en el único cine existente, Samay se siente deslumbrado de lo que por primera vez en su vida ve en pantalla y es allí donde surge su pasión por el séptimo arte. A pesar de que su padre (Dipen Raval) no está de acuerdo con el entusiasmo demostrado por su hijo ya que cree que la cinematografía es una profesión nada atractiva, el chico se ingenia para seguir viendo películas; así logra relacionarse con Fazal (Bhavesh Shrimali), el proyeccionista del cine que a cambio de comida preparada por su madre (Richa Meena), le permite ver gratuitamente los filmes que se exhiben diariamente desde la sala de proyección. De allí en más, el niño con su pandilla de amigos, utilizando un medio innovador consiguen elaborar un aparato de proyección para poder visionar películas de 35 milímetros a través de los rollos que han logrado procurarse.
Sin entrar a mayores detalles de lo que prosigue en esta historia, lo que resulta interesante es apreciar cómo la nueva tecnología digital deja de lado los rollos de cine y el modo en que el papel tradicional de proyeccionista tiende a desaparecer.
Aunque La Última Película trae a la memoria el remarcable y nostálgico relato de Cinema Paradiso (1988) de Guiseppe Tornatore, eso no disminuye los valores intrínsecos de este enternecedor film. Con suma delicadeza Nalin expresa los sentimientos de Samay en poder concretar sus sueños de concebir una historia atractiva y filmarla en el futuro, aunque es consciente de los sacrificios que deberá realizar para lograrlo; en tal sentido la interpretación de Rabari es de admirable autenticidad, asimismo como la actuación del resto del elenco permitiendo que el espectador pueda empatizar fácilmente con sus personajes.
Como un bello homenaje a los grandes maestros que hicieron posible la magia del cine, Nalin expresa su reconocimiento, entre otros, a los Hermanos Lumière, Eadweard Muybridge, Charles Chaplin, Vittorio de Sica, David Lean, Stanley Kubrick, Jean-Luc Godard, Michelangelo Antonioni, Francis Coppola, Andrei Tarkovsky, Alfred Hitchcock, Ingmar Bergman, Federico Fellini y Martin Scorcese. Jorge Gutman