Buen Dra­ma Social

LES PIRES. Fran­cia-2022. Un film escri­to y diri­gi­do por Lise Ako­ka y Roma­ne Gue­ret. 96 minutos

Galar­do­na­do con el pre­mio al mejor film pre­sen­ta­do en la sec­ción Un Cer­tain Regard de Can­nes 2022, en su pri­mer lar­go­me­tra­je las cineas­tas y guio­nis­tas Lise Ako­ka y Roma­ne Gue­ret abor­dan un dra­ma que des­pier­ta inte­rés den­tro de la estruc­tu­ra con­for­ma­da por una pelí­cu­la den­tro de otra.

Mallory Wanec­que y Timéo Mahaut

La his­to­ria se desa­rro­lla en la Ciu­dad Pablo Picas­so, un dis­tri­to de mono­blo­ques ubi­ca­do en los subur­bios de Bou­log­ne-Sur-Mer, en el nor­te de Fran­cia, en don­de Gabriel (Johan Hel­den­bergh), un direc­tor de cine bel­ga, deci­de rodar un film -A pis­ser con­tre le vent- y para ello efec­túa un cas­ting para selec­cio­nar acto­res no pro­fe­sio­na­les que per­te­nez­can a niños y ado­les­cen­tes de humil­de con­di­ción de vida. Los cua­tro pro­ta­go­nis­tas ele­gi­dos son Ryan (Timéo Mahaut), Lily (Mallory Wanec­que), May­lis (Méli­na Van­der­planc­ke) y Jessy (Loic Pech), que son los “peo­res” de esa comu­ni­dad (res­pon­dien­do al títu­lo del film), aun­que en reali­dad dis­tan de serlo.

Poco impor­ta el con­te­ni­do de la pelí­cu­la en la que inter­ven­drá el cuar­te­to men­cio­na­do sino lo que más intere­sa des­ta­car es la vida de cada uno de estos nove­les intér­pre­tes. Ryan es un niño con­flic­ti­vo que vive en casa de su her­ma­na mayor des­pués de haber trans­cu­rri­do en hoga­res de aco­gi­da al no poder ser cui­da­do por su madre (Domi­ni­que Frot), una mujer psi­co­ló­gi­ca­men­te ines­ta­ble. La atrac­ti­va Lily es una ado­les­cen­te que no tie­ne inhi­bi­ción de man­te­ner sexo casual con com­pa­ñe­ros de su escue­la. Jessy ha pasa­do tres meses en la cár­cel por haber hui­do des­pués que atro­pe­lló a un tran­seún­te. Por últi­mo se encuen­tra May­lis quien es la per­so­na más des­lu­ci­da de este equi­po. A tra­vés de estos per­so­na­jes que­da refle­ja­da su vul­ne­ra­bi­li­dad, la situa­ción pre­ca­ria en que viven como asi­mis­mo su per­te­nen­cia a fami­lias dis­fun­cio­na­les; en todo caso ellos apren­de­rán una bue­na lec­ción duran­te el roda­je del film.

Mien­tras fil­ma Gabriel demues­tra ser un insen­si­ble mani­pu­la­dor quien con el pro­pó­si­to de lograr el mayor rea­lis­mo de lo que está rodan­do lle­ga al pun­to de insul­tar a los acto­res. Pero más allá de las difi­cul­ta­des que sue­len pre­sen­tar­se en el roda­je de un film, en este caso que­da abier­ta la pre­gun­ta si aca­so los bene­fi­cios eco­nó­mi­cos que el la fil­ma­ción brin­da­rá al barrio pue­de con­tra­rres­tar la ima­gen de quie­nes en esa zona desa­rro­llan pro­gra­mas socia­les; es así como cier­tos prin­ci­pios éti­cos pue­den ser cuestionados.

Las nove­les direc­to­ras han logra­do que Les Pires impac­te emo­cio­nal­men­te en esta his­to­ria sóli­da­men­te narra­da que deam­bu­la entre la reali­dad y la fic­ción; asi­mis­mo la mis­ma es vigo­ri­za­da por la nota­ble auten­ti­ci­dad brin­da­da por remar­ca­bles acto­res que por pri­me­ra vez se han enfren­ta­do a una cáma­ra y que en cier­to modo se repre­sen­tan a sí mis­mos. Aho­ra bien, la gran pre­gun­ta es saber qué es lo que acon­te­ció con Mahaut, Wanec­que, Van­der­planc­ke y Pech, al vol­ver a enca­rar la coti­dia­na realidad.

En suma, este humano film de con­no­ta­ción social se apres­ta para ser deba­ti­do al cabo de su pro­yec­ción. Jor­ge Gutman