La Ter­nu­ra

LA TEN­DRES­SE. Bél­gi­ca-Fran­cia-Ale­ma­nia, 2013. Un film escri­to y diri­gi­do por Marion Hänsel 

Un film deli­ca­do, sobrio y suma­men­te tierno que jus­ti­fi­ca su títu­lo es lo que la rea­li­za­do­ra Marion Hän­sel ofre­ce en La Ten­dres­se, expo­nien­do la rela­ción de una pare­ja divor­cia­da cuyos inte­gran­tes se ven obli­ga­dos a reu­nir­se y con­vi­vir un par de días cuan­do el hijo de ambos recla­ma su presencia. 

Marilyne Canto y Frans Olivier Gourmet

Marily­ne Can­to y Oli­vier Gourmet

No es mucho lo que acon­te­ce en el film pero lo expues­to es lo sufi­cien­te­men­te nece­sa­rio como para que el espec­ta­dor selec­ti­vo apre­cie una obra madu­ra, cáli­da y de nota­ble hones­ti­dad. La mayor par­te de la acción se desa­rro­lla en una esta­ción de esquí ubi­ca­da en los Alpes fran­ce­ses don­de Jack (Adrien Joli­vet), un joven ins­truc­tor de esquí, ha sufri­do un acci­den­te frac­tu­rán­do­se una pier­na. Sus padres, Lisa (Marily­ne Can­to) y Frans (Oli­vier Gour­met) que viven sepa­ra­dos des­de hace 15 años en Bru­se­las, al reci­bir la noti­cia optan por via­jar jun­tos a Fran­cia para estar al lado del hijo en el lugar don­de se encuen­tra hospitalizado. 

Si bien Frans rehi­zo su vida sen­ti­men­tal no hay infor­ma­ción algu­na sobre cómo ha trans­cu­rri­do la vida de Lisa. Lo cier­to es que duran­te el tra­yec­to del via­je en coche se con­tem­pla que a pesar de haber vivi­do sepa­ra­dos duran­te con­si­de­ra­ble tiem­po, per­sis­te un afec­to bien mar­ca­do entre los ex cón­yu­ges. Afor­tu­na­da­men­te con gran suti­le­za, Hän­sel evi­ta que la rela­ción de bue­na con­vi­ven­cia exis­ten­te pue­da gene­rar la resu­rrec­ción del víncu­lo sen­ti­men­tal de otro­ra. Den­tro de un cli­ma jovial, el rela­to per­mi­te que duran­te el reco­rri­do se pro­duz­can situa­cio­nes don­de aso­man momen­tos de bro­mas, son­ri­sas, algu­nas que otras ren­ci­llas, todo ello den­tro de la ama­ble rela­ción exis­ten­te entre ambos. Cuan­do lle­gan al lugar se encuen­tran con que la reser­va de hotel con­tem­pla una sola pie­za para ambos y ese hecho se pres­ta para que de algún modo ten­gan que saber sobre­lle­var la situa­ción en for­ma armo­nio­sa. El encuen­tro con el hijo y su novia Ali­son (Mar­gaux Cha­te­lier), evi­den­cia el afec­to y cari­ño recí­pro­co exis­ten­te entre los padres y Jack. 

Como se apre­cia­rá de lo que ante­ce­de, el desa­rro­llo sen­ci­llo de la tra­ma no ofre­ce un cli­ma dra­má­ti­co, sal­vo el acci­den­te que da ori­gen al rela­to; sin embar­go, el méri­to del film resi­de en la exce­len­te des­crip­ción de sus per­so­na­jes y en la hones­ta cali­dez que des­pier­tan los mismos. 

La inter­pre­ta­ción es uni­for­me­men­te satis­fac­to­ria por la natu­ra­li­dad ofre­ci­da por Can­to y Gour­met pero tam­bién con­vie­ne des­ta­car la inter­ven­ción de Ser­gi López quien en un papel de bre­ves minu­tos se luce como un indi­vi­duo que hacien­do dedo logra que Lisa lo reco­ja en el camino de regre­so a Bélgica. 

Con­clu­sión: Un film sen­ci­llo pero sufi­cien­te­men­te con­vin­cen­te a tra­vés de las peque­ñas pero efec­ti­vas situa­cio­nes ple­nas de ter­nu­ra.  Jor­ge Gutman