LIFE. Canadá-Alemania-Australia-Estados Unidos, 2014. Un film de Anton Corbjn
La conocida revista americana LIFE publicó el 7 de marzo de 1955 una foto memorable titulada Dean in Times Square; la misma fue tomada por el prestigioso fotógrafo Dennis Stock donde la icónica imagen de James Dean atrajo la atención del público de Estados Unidos convirtiéndolo al poco tiempo en fulgurante estrella. Ese es el telón de fondo del film que se comenta.
La acción que transcurre hacia fines de 1954 y los primeros meses de 1955 comienza en Los Ángeles donde Stock (Robert Pattinson) de 26 años de edad llega a conocer en una reunión social a Dean (Dane DeHaan) de 23 años, quien lo invita a la proyección especial de East of Eden (1955), primer film por él protagonizado. A partir de allí surge el especial interés de Stock para tomarle una serie de fotografías para la revista; después de convencer a John Morris (Joel Edgerton) ‑jefe de la agencia Magnum para quien él reporta como fotógrafo independiente- sobre la tarea que desea realizar, Stock logra ser asignado para llevar a cabo este proyecto.
Aunque narrativamente el guión de Luke Davies no alcanza suficiente envergadura dramática el relato logra destacar la manera en que se va forjando la relación entre ambos protagonistas. Si bien al principio Stock debe superar el escollo del actor que se muestra poco entusiasmado y receloso a ser fotografiado, en última instancia logra ganar su confianza.
Lo más importante de Life es la acertada descripción de las contrastantes personalidades de sus dos personajes centrales, que en gran parte es debida a la muy buena personificación realizada por los actores que le dan vida.
DeHaan en la piel de Dean ofrece en cuerpo y alma el carácter del joven artista que se rebela contra el sistema imperante en la industria fílmica, resistiendo los esfuerzos de promoción empleados por Hollywood; por el contrario, sólo desea mantener su integridad como actor. Viendo a DeHaan es imposible olvidar a Dean como el muchacho introspectivo, melancólico, de mirada triste, hablando como si estuviera murmurando y transmitiendo las miradas, gestos y movimientos de su persona.
Por su parte, Pattinson realiza una muy buena composición de su personaje como el esmerado fotógrafo convencido de que el trabajo que está realizando constituirá una importante contribución al arte de la fotografía; eso, en parte compensa los fracasos de su vida sentimental al estar separado de su esposa e hijito. Es así que con firme persistencia sigue los pasos de Dean en su traslado a Nueva York y posteriormente a Fairmount en Indiana, el hogar natal del actor, para concretar exitosamente su objetivo profesional; al propio tiempo su trabajo le permite cimentar una cálida amistad con Dean, aunque de corta duración por el accidente automovilístico del 30 de septiembre de 1955 que cobró la vida del nuevo ídolo del cine americano. .
La dirección de Corbijn, que además es también un excelente fotógrafo, revela su afinidad con el tema donde a pesar del desigual guión de Davies obtiene un muy buen encuadre y acertada puesta escénica. En los renglones técnicos se distinguen los excelentes diseños de producción de Anastasia Masaro reconstruyendo fielmente la década del 50, el vestuario de época de Gersha Phillips y la fotografía de saturados colores de Charlotte Bruus Christensen.
Finalmente los cinéfilos experimentarán un sentimiento nostálgico con las referencias a personajes importantes del ambiente de cine de esa época donde entre otros se incluye a los realizadores Nicholas Ray (Peter Lucas) y Elia Kazan (Michael Therriault), la actriz italiana Pier Angeli (Alessandra Mastronardi) con quien Dean mantuvo un breve romance, el productor Jack Warner (Ben Kingsley) y la actriz Natalie Wood (Lauren Gallagher).
Jorge Gutman