BOMBSHELL. Estados Unidos, 2019. Un film de Jay Roach
El fenómeno del acoso sexual de la mujer es considerado en Bombshell, un docuficción basado en hechos verídicos. Aunque lo que se relata transcurre entre 2015 y 2016 bien podría constituir una de las tantas pruebas que demostró el movimiento #MetToo iniciado en octubre de 2017 como consecuencia del explosivo artículo del periodista Ronald Farrow publicado en la revista semanal The New Yorker.
En el guión preparado por Charles Randolph, el escenario en que transcurre la acción es el canal de televisión Fox News, de orientación conservadora; allí Roger Ailes (John Lithgow) fue desde 1996 hasta su caída en desgracia su director general y principal ejecutivo, habiendo sido además consejero en las contiendas electorales de Ronald Reagan, George W. Bush y Donald Trump.
En el canal trabajan Megyn Kelly (Charlize Theron) y Gretchen Carlson (Nicole Kidman) como presentadoras de sendos programas de dicha cadena. Kelly prontamente se gana la antipatía del candidato presidencial Donald Trump por las preguntas que le formula en un reportaje sobre el tratamiento que dispensa a las mujeres; debido a su gran popularidad y aceptando sin denunciar las reglas de juego impuestas por su jefe, sigue en funciones. En tanto, la veterana Gretchen es la que comienza a demostrar su rebeldía frente a las actitudes sexistas de Ailes.
A todo ello, el relato introduce a Kayla Pospisil (Margot Robbie), un personaje de ficción; ella es una joven recientemente empleada por la emisora que simpatiza plenamente con su filosofía y que cree tocar el cielo con las manos al haber sido contratada. Sin embargo, la inocencia de esta cristiana evangélica queda prontamente esfumada cuando en una conversación reservada en el despacho de Ailes, él le indica que ella debe ser leal a la empresa y como prueba le solicita que suba poco a poco su vestido hasta llegar a la zona íntima de su cuerpo.. La decepción que trasunta el rostro de la muchacha origina la escena más contundente del film donde queda expuesto uno de los mecanismos del hostigamiento sexual emprendido por el inmoral director.
Cuando en junio de 2016, Carlson es despedida sin justificación alguna, ella inicia una acción legal contra Ailes denunciando su comportamiento acerca de los favores sexuales requeridos al personal femenino; aunque con cierta reluctancia y bastante conflictuada, Kelly decide finalmente que ha llegado el momento de actuar colaborando con la denunciante. La sentencia judicial condenando al depredador sexual motiva a que el magnate australiano Rupert Murdoch (Malcolm McDowell), el dueño del canal, lo destituya del cargo.
A pesar de su importancia temática, la historia real descripta no alcanza la envergadura dramática necesaria en la medida que su guión describe erráticamente a sus personajes sin profundizarlos suficientemente. Con todo, cabe reconocer que Roach ha contado con un calificado elenco donde se destacan las actuaciones de Theron y Robbie; asimismo resulta excelente la labor de maquillaje realizada para que los actores se asemejen físicamente a los personajes reales.
Lo más trascendente del film es demostrar de qué manera puede quedar degradada la dignidad de una mujer cuando es considerada como mero objeto sexual en el marco de un ambiente laboral asfixiante. En ese sentido, a pesar de las objeciones señaladas, resulta positivo el aporte del realizador al ilustrar el escándalo generado por Ailes que sirvió como precursor del movimiento feminista que sobrevendría poco tiempo después. Jorge Gutman