SALT IN MY SOUL. Estados Unidos, 2021. Un documental de Will Battersby. 96 minutos. Disponible en línea en las plataformas de Apple TV/i y Microsoft/box
En su segundo trabajo de documentalista Will Battersby centra su atención en Mallory Smith, quien ha sufrido en su corta vida de fibrosis cística. Esta es una enfermedad genética que produce mucosidad en los pulmones y el daño producido por la infección limita progresivamente la habilidad respiratoria, además de afectar el sistema digestivo.
Ciertamente ha sido un desafío para el director la tarea de exponer el sufrimiento de Mallory quien a los tres años de edad le fue diagnosticada esa dramática enfermedad. Con suma delicadeza y gran sensibilidad Battersby enfoca su trayectoria basándose en el libro Sal en mi Alma: Una Vida Incompleta. Esta obra publicada después de su deceso condensa las 2500 páginas de lo que ella escribió en su diario secreto almacenado en su computadora; a ello el documental incluye material de archivo, videos caseros y grabaciones en audio con la voz de Mallory como narradora.
Sabiendo desde pequeña que su dolencia es incurable y que su pronóstico de vida es breve, su actitud es decididamente positiva tratando de afirmarse en su existencia en las distintas actividades emprendidas; así en el campo deportivo sobresale practicando natación y jugando al vóleibol; en materia educacional se distingue en sus estudios de enseñanza media prosiguiendo una carrera universitaria en Stanford. A pesar de su grave malestar, su perseverancia unida a su inigualable fuerza de voluntad le valió para luchar contra viento y marea a fin de disfrutar cada minuto de su vida.
El documental refleja las distintas etapas que ella atravesó para tratar de contener la expansión de la enfermedad mediante diferentes tratamientos clínicos así como su permanencia en hospitales que incluyó un trasplante de pulmón: desafortunadamente, la muerte que permanentemente estuvo pisándole los talones finalmente la arrebató en 2017 a los 25 años de edad.
A través de esta crónica se destaca el profundo amor que Mallory recibió de sus padres, como así también de sus amigos y de su relación sentimental mantenida con el joven Jack Goodwin. A su vez el documental resalta la gran nobleza de esta excepcional mujer convertida en escritora en donde aguardaba que lo que ella experimentaba sirviera de esperanza para quienes sufren de enfermedades crónicas o similares.
Sin almibarar su contenido ni menos aún despertar compasión de la audiencia, Battersby ha logrado un profundo, emotivo y humano documento que constituye un canto a la vida ilustrando el legado de una estoica combatiente que jamás se dejó vencer por la adversidad y que por el contrario supo aderezar su alma con sal. Jorge Gutman