LES TORTUES. Bélgica-Canadá, 2023. Un film escrito y dirigido por David Lambert. 83 minutos
Aunque las vicisitudes de la convivencia conyugal ha sido considerada por el cine en numerosas ocasiones, en cambio no ha sido frecuente, el tratamiento cuando se trata de personas de edad madura. Ese es el tema que considera el realizador David Lambert en Les Tortues enfocando la crisis que se produce en el seno de un matrimonio gay después de una larga vida en común.
El relato comienza el primer día de jubilación del policía Henri (Olivier Gourmet) que convive en Bruselas con su pareja Thorn (Dave Johns), un expatriado británico que igualmente en retiro ha sido su vez drag queen y posteriormente anticuario. Ambos han compartido 35 años de vida conyugal y ahora en su retiro tienen que afrontar a estar juntos durante la diaria jornada. Sin embargo Henri no es muy feliz con la idea de sobrellevar esa rutina, demostrando su descontento hacia su compañero mediante gestos de desdén; a pesar de eso, el bondadoso y sumiso Thorn realiza lo imposible para satisfacerlo, tal como se aprecia en la primera escena en que le sirve el desayuno en la cama, le masajea sus pies y trata de agradarlo cantándole una canción.
En medio de su crisis existencial Henry acude a un sitio de reencuentros con el propósito de encontrar a un hombre con quien pueda nuevamente experimentar su placer sexual. Cuando Thorn se impone de tal situación resuelve iniciar los trámites de divorcio con la esperanza de que a la postre pueda reconquistar a su pareja.
Dentro del marco descripto, como telón de fondo Lambert asimismo rememora en su relato los años en que irrumpió el sida, la homofobia existente de no hace mucho tiempo atrás así como el paso positivo de permitir la unión matrimonial de personas de igual sexo.
El tema descripto es universal en donde Lambert refleja la posibilidad de que el amor entre dos seres, independientemente de la orientación sexual, con el paso del tiempo pueda esfumarse cuando la atracción física desaparece. Con todo, el realizador se muestra optimista permitiendo que la desaveniencia conyugal encuentre solución en la medida que lo que en el fondo predomina en esta pareja es el apego y amor, capaz de revitlizar el resplandor de los años jóvenes.
No obstante que la historia conduce a un desenlace previsible, eso no aminora su valor en el que en gran parte se debe a las notables actuaciones de Gourmet y Johns donde ambos consagrados intérpretes transmiten con autenticidad la naturaleza de sus respectivos personajes así como la lograda complicidad existente entre los mismos. En papeles de apoyo participan Brigitte Poupart como la gran amiga de Thorn, así como Vanessa Van Durme animando a la Madame del club nocturno al que suele acudir Henri.
En esencia, Lambert ofrece un film que lejos de ser grandilocuente y sin pretensión alguna está bien narrado a la vez que la dosis de ternura impregnada en su contenido permite concitar la adhesión del espectador. Jorge Gutman