El Gran Fes­ti­val de las Luces

MON­TRÉAL EN LUMIERE

Aun­que aún fal­tan casi 3 meses para que se ini­cie la 17va. edi­ción de Mon­tréal en Lumiè­re, el equi­po Spec­tra que es res­pon­sa­ble del fes­ti­val ha anti­ci­pa­do algu­nos de los impor­tan­tes even­tos que ten­drán lugar entre el 18 de febre­ro y el 5 de mar­zo de 2016. Como todos los años habrá una amplia gama de acti­vi­da­des cul­tu­ra­les con espec­tácu­los de tea­tro, con­cier­tos, can­cio­nes, dan­za y arte cir­cen­se, entre otros.

A con­ti­nua­ción se des­ta­can algu­nos de los más rele­van­tes even­tos comen­zan­do con dos impor­tan­tes con­cier­tos de músi­ca clá­si­ca. Tri­bu­tan­do un home­na­je a la gran ciu­dad chi­na de Shenzhen, el públi­co ten­drá oca­sión de juz­gar por pri­me­ra vez a la Orques­ta Sin­fó­ni­ca de Shenzhen bajo la direc­ción de Jin­dong Cai con un pro­gra­ma de obras clá­si­cas chi­nas y de Euro­pa en cele­bra­ción del nue­vo año chino; en dicho con­cier­to actua­rá como solis­ta el des­ta­ca­do vio­li­nis­ta Dan Zhu (21 de febre­ro, 20h. Mai­son sympho­ni­que de Montréal).

CHARLES DUTOIT

CHAR­LES DUTOIT

El otro acon­te­ci­mien­to espe­cial que ofre­ce­rá el fes­ti­val es el gran retorno del maes­tro Char­les Dutoit al fren­te de la OSM, des­pués de 14 años de ausen­cia. Habien­do sido el direc­tor musi­cal de esta excep­cio­nal orques­ta por espa­cio de 25 años don­de con­tri­bu­yó a ele­var­la al ran­go de una de las más impor­tan­tes del mun­do, el con­cier­to que ofre­ce­rá cons­ti­tui­rá un acon­te­ci­mien­to musi­cal den­tro de un cli­ma de gran emo­ti­vi­dad. Si la pre­sen­cia del maes­tro es impor­tan­te no menos lo será la de Martha Arge­rich, que hoy día es con­si­de­ra­da como una de las más gran­des pia­nis­tas vivien­tes del mun­do. La legen­da­ria artis­ta será acom­pa­ña­da por la orques­ta en la eje­cu­ción del Con­cier­to para Piano N° 1 de Beetho­ven. El pro­gra­ma se com­ple­ta con la Ober­tu­ra Car­na­val Romano de Ber­lioz, Petrush­ka (ver­sión ori­gi­nal de 1911) de Stra­vinsky y La Val­se de Ravel (18 y 20 de febre­ro, 20h, Mai­son sympho­ni­que de Montréal).

TRIO FIBONACCI

TRIO FIBO­NAC­CI

Tam­bién den­tro de la músi­ca clá­si­ca el públi­co ten­drá oca­sión de apre­ciar al Trio Fibo­nac­ci que ofre­ce­rá un con­cier­to con obras de Sibe­lius, Mozart, Hil­de­gar­de de Bin­gen, Ëric Cham­pag­ne, John Tave­ner y Arvo Pärt para vio­lín, vio­lon­che­lo y piano (20 de febre­ro, 19h30, Sala Bour­gie) Por su par­te el con­jun­to I Musi­ci ofre­ce­rá un con­cier­to que comen­za­rá con la penúl­ti­ma sin­fo­nía de Shos­ta­ko­vich y con­ti­nua­rá con la Sin­fo­nía De los Adio­ses (N° 45) de Haydn (25 de febre­ro, 20h, Sala Bour­gie). Les Vio­lons du Roy, otro impor­tan­te con­jun­to de Que­bec vol­ca­rá su pasión por la músi­ca de Bach en un con­cier­to diri­gi­do por Ber­nard Laba­die (26 de febre­ro, 19h30, Sala Bourgie).

MUSICA CUBANA

MUSI­CA CUBANA

En el cam­po de la músi­ca popu­lar el fes­ti­val pre­sen­ta­rá a dis­tin­gui­dos artis­tas, entre ellos se encuen­tra el joven pia­nis­ta fran­cés Tho­mas Enh­co quien espe­cia­li­za­do en jazz ha impre­sio­na­do gra­ta­men­te en el FIJM de 2013; aho­ra regre­sa para pre­sen­tar su recien­te dis­co (18 de febre­ro, 18h, Sala Bour­gie). Una gra­ta visi­ta es la del trío ins­tru­men­tal de Japón Mou­se on the Keys don­de el piano mini­ma­lis­ta se une a diná­mi­cas per­cu­sio­nes para brin­dar una mez­cla de músi­ca elec­tró­ni­ca, funk, jazz y post-rock (18 de febre­ro, 20h, L’Astral). Tam­bién esta­rá pre­sen­te el autor y com­po­si­tor cana­dien­se Calum Graham quien habien­do obte­ni­do un rotun­do éxi­to en el Fes­ti­val Inter­na­cio­nal de Jazz de Mon­treal de este año, aho­ra retor­na con un reper­to­rio de 5 álbu­mes (26 de febre­ro, 20h, L’Astral). Otro artis­ta des­ta­ca­do es Rodri­go Ama­ran­te, un ex miem­bro del con­jun­to bra­si­le­ño Los Her­ma­nos don­de can­tan­do en por­tu­gués, fran­cés e inglés expre­sa con cali­dez el sen­ti­mien­to de “sau­da­de” de Bra­sil (27 de febre­ro, 20h, Gesu). Otra visi­ta a tener en cuen­ta es la de Angé­li­que Iona­tos, exce­len­te gui­ta­rris­ta y can­tan­te grie­ga que cul­ti­va un uni­ver­so musi­cal com­ple­ta­men­te vin­cu­la­do con la poe­sía y lite­ra­tu­ra; su pro­fun­da y reso­nan­te voz trans­mi­te la rique­za de la cul­tu­ra medi­te­rrá­nea y para esta oca­sión lle­ga­rá a can­tar temas de su vigé­si­mo álbum (28 de febre­ro, 20h, Gesu). Dos vela­das impor­tan­tes serán ofre­ci­das por la artis­ta Clai­re Garand; en la pri­me­ra brin­da­rá un sin­gu­lar home­na­je a la inmor­tal Edith Piaf (24 de febre­ro, 20h, Le Bal­con) y en su segun­da pre­sen­ta­ción dedi­ca­rá su aten­ción a Dali­da con can­cio­nes de su inmen­so reper­to­rio (25 de febre­ro, 20h, Le Bal­con). El públi­co que gus­ta del rit­mo cubano ten­drá la oca­sión de asis­tir a Músi­ca Cuba­na, con la Cuban Mar­tí­nez Band ani­man­do un espec­tácu­lo colo­ri­do de sabor tro­pi­cal don­de no esta­rán ausen­tes la sal­sa, el cha-cha-cha, el meren­gue, el bole­ro y otras expre­sio­nes de la rique­za musi­cal de la isla del Cari­be (26 de febre­ro, 20h30, Le Balcon).

BALLET FLAMENCO DE ANDALUCIA

BALLET FLA­MEN­CO DE ANDALUCIA

Para los aman­tes de la dan­za, el Ballet Fla­men­co de Anda­lu­cía satis­fa­rá sus expec­ta­ti­vas. En más de 20 años des­de que fue crea­do, este con­jun­to artís­ti­co ha espar­ci­do la magia del fla­men­co a tra­vés del mun­do con sus exce­len­tes bai­la­ri­nes y can­tao­res guia­da por la coreo­gra­fía de Rafae­la Carras­co (27 y 28 de febre­ro, 19h, Sala Pierre-Mercure).

ERIC EMMANUEL SCHMITT

ERIC EMMA­NUEL SCHMITT

En mate­ria tea­tral, se dis­tin­guen tres espec­tácu­los. Uno de ellas es Mon­sieur Ibrahim y las Flo­res del Corán en base a la nove­la de Eric Emma­nuel Sch­mitt y que fue lle­va­da al cine con la inter­pre­ta­ción del des­apa­re­ci­do actor Omar Sha­rif en el rol prin­ci­pal; en su adap­ta­ción tea­tral, esta his­to­ria de sabi­du­ría y tole­ran­cia con­ta­rá con la par­ti­ci­pa­ción de su autor (19 y 20 de febre­ro, 20h, Sala Pie­rre-Mer­cu­re del Cen­tro Pie­rre-Péla­deau). Otra pie­za tea­tral es Glen­garry Glen Ross de David Mamet que obtu­vo el Pre­mio Pulitzer en 1984. Su tema gira en torno a la des­pia­da­da com­pe­ti­ti­vi­dad que se gene­ra en una empre­sa inmo­bi­lia­ria cuan­do impo­ne incen­ti­vos a sus emplea­dos que resul­ten mejo­res ven­de­do­res y des­pi­dien­do a quien ven­da menos; en esa carre­ra feroz cual­quier argu­cia es váli­da para incre­men­tar las ven­tas y no sucum­bir. El direc­tor escé­ni­co es Fré­dé­ric Blan­chet­te y en su repar­to par­ti­ci­pan, entre otros, Denis Bou­chard, Éric Bru­neau, Luc Bour­geo­is, Fabien Clou­tier y Renaud Para­dis (del 2 al 27 de febre­ro , hora­rios varia­bles, Tea­tro Rideau Vert). Final­men­te, en Fri­da Kah­lo: Corres­pon­dan­ce, la cono­ci­da actriz de Que­bec Sophie Fau­cher ofre­ce­rá una lec­tu­ra tea­tra­li­za­da de la vida de la famo­sa pin­tu­ra mexi­ca­na Fri­da Kah­lo; car­tas, men­sa­jes, poe­mas, dia­rio ínti­mo, cons­ti­tu­yen el mate­rial de apo­yo acom­pa­ña­do por los Maria­chi Figueroa.

FRIDA KAHLO: CORRESPONDANCE

FRI­DA KAH­LO: CORRESPONDANCE

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El Tra­di­cio­nal Ballet de las Fies­tas Navideñas

LES GRANDS BALLETS PRE­SEN­TA EL CASCANUECES

Nin­gu­na otra pro­duc­ción de ballet ha sido repre­sen­ta­da en Cana­dá en un mis­mo lugar duran­te 41 años como es El Cas­ca­nue­ces bai­la­do por el elen­co artís­ti­co de Les Grands Ballets Cana­diens de Mon­tréal (LGBC).

THE NUTCRACKERDes­de sus pri­me­ras repre­sen­ta­cio­nes en Mon­treal en 1964 has­ta la fecha ha sido pre­sen­cia­da por más de 2 millo­nes de espec­ta­do­res y todo pare­ce indi­car que el éxi­to habrá de con­ti­nuar inin­te­rrum­pi­da­men­te. Eso se debe a la con­jun­ción de la músi­ca mara­vi­llo­sa con­ce­bi­da por Tchai­kovsky, la her­mo­sa his­to­ria escri­ta por Ivan Vse­vo­lozhsky y Marius Peti­pa basa­da en el cuen­to El Cas­ca­nue­ces y el rey de los rato­nes de Ernst Theo­dor Ama­deus Hoff­mann y a la maes­tría demos­tra­da por los bai­la­ri­nes de LGBC.

La tra­ma tie­ne lugar en una Noche­bue­na don­de la fami­lia de la peque­ña Cla­ra se reúne para cele­brar la Navi­dad. El padrino de Cla­ra, Herr Dros­sel­me­ver le rega­la un her­mo­so cas­ca­nue­ces de made­ra, que es que­bra­do por su her­mano Fritz en un ges­to de celos. Afor­tu­na­da­men­te, el padrino, quien tam­bién posee cier­tas dotes de mago, es capaz de repa­rar­lo. Duran­te la noche, des­pués de que todos se han acos­ta­do, Cla­ra retor­na a la sala para veri­fi­car que todo está en orden con su que­ri­do cas­ca­nue­ces. Repen­ti­na­men­te ratas y rato­nes inva­den la habi­ta­ción y comien­zan una bata­lla con un ejér­ci­to de sol­da­dos de jen­gi­bre. Cla­ra que se encuen­tra en peli­gro ve cómo el cas­ca­nue­ces lle­ga para res­ca­tar­la trans­for­mán­do­se en un prín­ci­pe encan­ta­dor. Él la con­du­ci­rá al Rei­no de la Nie­ve y pos­te­rior­men­te al Rei­no de los Dul­ces, don­de ella ten­drá una aven­tu­ra mági­ca con per­so­na­jes animados.

THE NUTCRACKER (2)

Con más de 100 bai­la­ri­nes en esce­na, este cuen­to mági­co coreo­gra­fia­do por Fer­nand Nault será repre­sen­ta­do en el esce­na­rio de la sala Wil­frid-Pelle­tier de la Pla­ce des Arts des­de el 11 has­ta el 30 de diciem­bre. La Orques­ta de LGBC será diri­gi­da por Allan Lewis y Flo­rian Ziemen

Con­ti­nuan­do con lo que se ha veni­do rea­li­zan­do en años ante­rio­res, en esta oca­sión nue­va­men­te se pro­ce­de­rá a una sin­gu­lar elec­ción. Una hora antes de que comien­ce la fun­ción, el actor Jac­ques Piper­ni lee­rá a los niños asis­ten­tes el cuen­to de Hoff­mann e inme­dia­ta­men­te des­pués será ele­gi­do al azar el Ratón del Día. El niño o niña elegido(a) será vestido(a) de ratón y apa­re­ce­rá en esce­na duran­te el trans­cur­so del pri­mer acto, para retor­nar a su asien­to duran­te el entre­ac­to y pro­se­guir vien­do el res­to de la representación.

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Un Buen Final

THE HUN­GER GAMES: MOC­KING­JAY PART 2. Esta­dos Uni­dos, 2014. Un film de Fran­cis Lawrence

Jennifer Lawrence

Jen­ni­fer Lawrence

Des­pués de la pri­me­ra mitad de la últi­ma entre­ga de la tri­lo­gía de Suzan­ne Collins que se cono­ció en noviem­bre de 2014, aho­ra ha lle­ga­do el momen­to de deve­lar su des­en­la­ce. Su con­clu­sión impre­sio­na favo­ra­ble­men­te por­que la for­ma en que que­da resuel­ta la odi­sea de Kat­niss Ever­deen (Jen­ni­fer Law­ren­ce) alcan­za en deter­mi­na­dos momen­tos dimen­sio­nes emo­cio­na­les que gene­ral­men­te sue­len estar ausen­tes en los típi­cos rela­tos del géne­ro. Ade­más, esta fan­ta­sía post apo­ca­líp­ti­ca tie­ne un cla­ro men­sa­je ati­nen­te a demos­trar de qué mane­ra el poder tirá­ni­co y des­con­tro­la­do de un gobierno pue­de alcan­zar ribe­tes dra­má­ti­cos para sus opri­mi­dos ciudadanos.

Reto­man­do el rela­to don­de que­dó incon­clu­so, se recor­da­rá que Alma Coin (Julian­ne Moo­re), la pre­si­den­ta del Dis­tri­to 13 y líder de la revuel­ta que se está ges­tan­do, uti­li­za a a Kat­niss como el emble­ma de la revo­lu­ción. Sin embar­go, la joven desea asu­mir un rol mucho más visi­ble y acti­vo que impli­ca estar al fren­te de la bata­lla y lograr matar a Snow (Donald Suther­land), el hom­bre que sinies­tra­men­te pre­si­de los des­ti­nos de Panem.

Para poder entrar al reduc­to de su enemi­go y cum­plir su obje­ti­vo, Kat­niss se encuen­tra acom­pa­ña­da por un gru­po de ami­gos y sol­da­dos com­ple­ta­men­te iden­ti­fi­ca­dos con su cau­sa; entre otros, se des­ta­can Pee­ta (Josh Hut­cher­son), quien había sido obje­to de un lava­do de cere­bro por par­te del Capi­to­lio y que len­ta­men­te logra recu­pe­rar su memo­ria, Gale (Liam Hems­worth), Fin­nick (Sam Cla­flin), Boggs (Mahersha­la Ali), Cres­si­da (Nata­lie Dor­mer), Johan­na (Jena Malo­ne) y Prim (Willow Shields). A todo ello, el mal­va­do pre­si­den­te que es cons­cien­te de que el movi­mien­to pue­de alcan­zar visos insos­pe­cha­dos, no vaci­la en uti­li­zar todos los recur­sos que tie­ne a su alcan­ce para aplas­tar defi­ni­ti­va­men­te a los insu­rrec­tos y sobre todo a Kat­niss; de este modo, les tien­de dife­ren­tes tipos de tram­pas que ponen en peli­gro sus vidas. Sin embar­go, los rebel­des no que­dan ami­la­na­dos, en espe­cial la heroí­na de esta his­to­ria que sabe muy bien que en el desa­fío que enfren­ta no está en jue­go sola­men­te su super­vi­ven­cia sino el des­tino de los habi­tan­tes de los 13 dis­tri­tos de Panem.

En base a lo que ante­ce­de, el guión de Peter Craig y Danny Strong ofre­ce secuen­cias de acción muy bien resuel­tas que supe­ran a las de las entre­gas ante­rio­res. Pero la vio­len­cia nun­ca lle­ga a des­bor­dar sien­do fun­cio­nal al pro­pó­si­to per­se­gui­do por Collins.

En cuan­to al aspec­to román­ti­co del rela­to, el mis­mo es ape­nas anec­dó­ti­co y poco impor­ta saber o ade­lan­tar si en el trián­gu­lo amo­ro­so será el emo­cio­nal­men­te afec­ta­do Pee­ta o el apues­to Gale quien gana­rá el cora­zón de Kat­niss. Afor­tu­na­da­men­te, el libre­to no dedi­ca mucho tiem­po a este asun­to para en cam­bio demos­trar que la preo­cu­pa­ción mayor de la joven gue­rre­ra resi­de en com­ba­tir a su funes­to enemigo.

Si bien esta segun­da mitad de la tri­lo­gía cobra inusi­ta­da ener­gía, el fac­tor sor­pre­sa que depa­ra su des­en­la­ce refuer­za aún más el inte­rés de la mis­ma. Solo bas­ta anti­ci­par que la reso­lu­ción no es la que uno aguar­da­ría sino otra total­men­te dife­ren­te que actúa como una señal de aler­ta demos­tran­do cómo quie­nes bus­can derro­tar a gobier­nos corrup­tos pue­den alber­gar inten­cio­nes ocul­tas que nue­va­men­te harían peli­grar la demo­cra­cia de una socie­dad civilizada.

El direc­tor Fran­cis Law­ren­ce logra evi­tar los des­ni­ve­les exis­ten­tes de la pri­me­ra par­te impri­mien­do aquí un dina­mis­mo que agi­li­za al rela­to sin lle­gar a decaer.. En el vas­to elen­co, amplia­men­te se des­ta­ca Law­ren­ce infun­dien­do vida a su rol y en últi­ma ins­tan­cia es ella quien con su efi­cien­te actua­ción cons­ti­tu­ye el alma de esta fran­qui­cia. En pape­les secun­da­rios Eli­za­beth Banks, Stan­ley Tuc­ci, Woody Harrel­son y el des­apa­re­ci­do Phi­lip Sey­mour Hoff­man en su pós­tu­mo rol, se desem­pe­ñan correctamente.

Con­clu­sión: Un satis­fac­to­rio final de una pre­cau­to­ria fan­ta­sía moral sobre regí­me­nes tirá­ni­cos y opre­si­vos.
Jor­ge Gutman

Una Exce­len­te Inves­ti­ga­ción Periodística

SPOTLIGHT. Esta­dos Uni­dos, 2015. Un film de Tom McCarthy

El rea­li­za­dor Tom McCarthy ofre­ce un exce­len­te film de inves­ti­ga­ción perio­dís­ti­ca que por su cali­dad pue­de com­pa­rar­se a All The President’s Men (1976) de Alan J. Paku­la. y Zodiac (2007) de David Fin­cher. Estruc­tu­ra­do a la mane­ra de un thri­ller, su tema enfo­ca el encu­bri­mien­to de los abu­sos sexua­les de miem­bros de la Igle­sia Cató­li­ca a niños parro­quia­nos ocu­rri­dos en el esta­do de Massachusetts.

El dra­ma, en base a un guión del rea­li­za­dor escri­to con Josh Sin­ger, rela­ta los esfuer­zos empren­di­dos por el dia­rio The Bos­ton Glo­be para escla­re­cer los luc­tuo­sos hechos que aun­que sabi­dos que­da­ron has­ta ese momen­to ocul­tos, como si exis­tie­se en la pobla­ción y sus fuer­zas vivas una cons­pi­ra­ción de silen­cio para no divul­gar las tris­tes accio­nes que acon­te­cían en el seno de la Iglesia.

Mark Ruffalo

Mark Ruf­fa­lo

Todo comien­za en julio de 2001 cuan­do se lle­ga a saber que el reti­ra­do sacer­do­te John Geoghan enfren­ta­ba acu­sa­cio­nes de haber moles­ta­do a dece­nas de niños duran­te el perío­do en que ejer­ció sus fun­cio­nes reli­gio­sas. Al pro­pio tiem­po se supo que el arzo­bis­pa­do de Bos­ton a tra­vés del Car­de­nal Ber­nard Law (Len Cariou) pro­te­gía a varios curas que vio­la­ron a jóve­nes feli­gre­ses, don­de en muchos casos esos asun­tos se solu­cio­na­ban fue­ra del sis­te­ma legal a tra­vés de los abo­ga­dos defen­so­res de la ins­ti­tu­ción. Aun­que el matu­tino pre­via­men­te se había refe­ri­do al asun­to con algu­nas notas publi­ca­das pero sin efec­tuar su segui­mien­to, es con la lle­ga­da de su nue­vo edi­tor Marty Paron (Liev Schrei­ber) que cam­bia la situa­ción cuan­do deter­mi­na que el Bos­ton Glo­be inda­gue con mayor pro­fun­di­dad sobre el tema. De este modo se cons­ti­tu­ye el equi­po Spotlight lide­ra­do por el edi­tor Wal­ter “Robby” Robin­son (Michael Kea­ton) quien jun­to con los repor­te­ros Michael Rezen­des (Mark Ruf­fa­lo), Sacha Pfeif­fer (Rachel McA­dams) y Matt Carroll (Brian D’Arcy James) tie­nen a su car­go la deli­ca­da misión de tra­tar de “des­ta­par la olla” públicamente.

El rela­to ofre­ce inusi­ta­da ten­sión en la medi­da en que cada uno de los perio­dis­tas cum­plien­do con las res­pec­ti­vas tareas asig­na­das debe enfren­tar nume­ro­sos obs­tácu­los; eso gene­ra en el rela­to diver­sas sub­tra­mas de efi­caz intri­ga que ter­mi­nan cohe­sio­nán­do­se satis­fac­to­ria­men­te. Así, Spotlight tra­ba­jan­do afa­no­sa­men­te y con enor­me pre­sión psi­co­ló­gi­ca duran­te el espa­cio de un año, va reve­lan­do los por­me­no­res de una his­to­ria escan­da­lo­sa que vino desa­rro­llán­do­se des­de hacía bas­tan­te tiem­po; lo sor­pren­den­te es que lo acon­te­ci­do en el esta­do de Mas­sa­chu­setts no fue algo cir­cuns­tan­cial sino que tam­bién ocu­rrió en otros rin­co­nes del mun­do con rami­fi­ca­cio­nes que inclu­so lle­ga­ron has­ta el pro­pio cora­zón de El Vati­cano. Más aún, tal como se apre­cia en el film, los ecle­siás­ti­cos impu­tados en vez de enfren­tar a la jus­ti­cia y ser encar­ce­la­dos eran sim­ple­men­te tras­la­da­dos de una parro­quia a la otra, que­dan­do de esta mane­ra impu­nes de los abo­mi­na­bles deli­tos come­ti­dos. Cabe seña­lar que el esfor­za­do tra­ba­jo de este bri­llan­te equi­po mere­ció que el Bos­ton Glo­be reci­bie­ra el pres­ti­gio­so Pre­mio Pulitzer.

A tra­vés de una narra­ción sen­si­ble y arti­cu­la­da sin caer en sen­sa­cio­na­lis­mos injus­ti­fi­ca­dos, el rea­li­za­dor obtie­ne un film impe­ca­ble que ofre­ce momen­tos de genui­na emo­ción como, por ejem­plo, cuan­do la perio­dis­ta Pfeif­fer se apro­xi­ma a un clé­ri­go ya jubi­la­do pre­gun­tán­do­le si algu­na vez ejer­ció un acto de pedofi­lia. McCarthy ha teni­do una exce­len­te visión para selec­cio­nar a su elen­co por­que cada uno de los acto­res prin­ci­pa­les rea­li­za una labor irre­pro­cha­ble; si a títu­lo per­so­nal podría dis­tin­guir las logra­das carac­te­ri­za­cio­nes de Kea­ton, Ruf­fa­lo y McA­dams, no le va en zaga la labor des­ple­ga­da en roles de apo­yo de Stan­ley Tuc­ci, Billy Cru­dup, John Slat­tery y Jamey Sheridan.

Des­pués de la visión de este valien­te film, uno se pre­gun­ta por­qué demo­ró tan­to tiem­po en efec­tuar­se la valien­te denun­cia empren­di­da por el dia­rio y cómo ha sido posi­ble que sacer­do­tes supues­ta­men­te res­pe­ta­bles de la Igle­sia pudie­ran ser into­ca­bles den­tro del seno de una socie­dad civi­li­za­da; no menos impor­tan­te es pen­sar en el daño emo­cio­nal infe­ri­do a sus víc­ti­mas dejan­do heri­das emo­cio­na­les difí­ci­les de cicatrizar.

Con­clu­sión: Un film de visión impres­cin­di­ble que des­ta­ca la noble misión que el perio­dis­mo de inves­ti­ga­ción pue­de desem­pe­ñar en el seno de una socie­dad denun­cia­do sus lacras mora­les. Jor­ge Gutman

Un Dra­ma Monó­tono y Reiterativo

BY THE SEA. Esta­dos Uni­dos, 2015. Un film escri­to y diri­gi­do por Ange­li­na Jolie Pitt

Una déca­da des­pués de haber actua­do jun­tos por pri­me­ra vez en Mr. & Mrs. Smith, ia pare­ja más popu­lar del cine vuel­ve a apa­re­cer en la pan­ta­lla en By The Sea, ter­ce­ra incur­sión de Ange­li­na Jolie Pitt como direc­to­ra. En esta oca­sión la bella actriz ana­li­za el dete­rio­ro de una rela­ción con­yu­gal des­pués de varios años de con­vi­ven­cia. Lamen­ta­ble­men­te, el film no lle­ga a dis­tin­guir­se en la medi­da que la lan­gui­dez, len­ti­tud y la insis­ten­te repe­ti­ción de esce­nas resien­ten sen­si­ble­men­te la efi­ca­cia del relato.

Brad Pitt y Angelina Jolie Pitt

Brad Pitt y Ange­li­na Jolie Pitt

La acción que se ubi­ca en la déca­da del 70 en la cos­ta fran­ce­sa de un peque­ño pue­blo no espe­ci­fi­ca­do, sigue los pasos de Roland (Brad Pitt) y Vanes­sa (Jolie Pitt), un matri­mo­nio neo­yor­kino de 14 años de exis­ten­cia. Des­de el momen­to en que lle­gan a la habi­ta­ción del hotel que­da cla­ro que algo no mar­cha bien entre ambos; él es un escri­tor y com­pren­si­vo espo­so que tole­ra el mal humor de su espo­sa, una ex bai­la­ri­na que atra­vie­sa un esta­do de mar­ca­da depre­sión. Algo muy serio pare­ce aque­jar­la aun­que no hay pau­ta pre­ci­sa sobre las razo­nes del trau­ma pade­ci­do. Mien­tras Roland tra­ta de con­cen­trar­se en la pre­pa­ra­ción de una nove­la y acu­de asi­dua­men­te al café local don­de es tra­ta­do con cali­dez y gran ama­bi­li­dad por el encar­ga­do del mis­mo (Niels Ares­tup), su espo­sa des­ti­na el tiem­po para estar en la cama, salir al bal­cón para con­tem­plar el mar y a veces cami­nar para mez­clar­se con la gen­te del pue­blo y hacer algu­nas com­pras. Si bien la rea­li­za­do­ra ha tra­ta­do de man­te­ner un bajo per­fil con­te­nien­do las emo­cio­nes y pre­fi­rien­do que se apre­cie más lo que no se dice o se esté callan­do, uno que­da com­ple­ta­men­te alie­na­do con la cons­tan­te inco­mu­ni­ca­ción de Vanes­sa, resul­tan­do difí­cil con­mi­se­rar­se con lo que le está pasan­do a pesar de su dra­ma interno.

El rela­to comien­za a cobrar cier­to vue­lo des­pués de 55 minu­tos, cuan­do lle­ga al hotel Lea (Mela­nie Lau­rent) y su mari­do Fra­nçois (Mel­vin Pou­paud) quie­nes recién casa­dos se apres­tan a pasar su luna de miel ocu­pan­do la habi­ta­ción con­ti­gua a la de Roland y su seño­ra. Cuan­do Vanes­sa des­cu­bre que hay un peque­ño ori­fi­cio en la pared que comu­ni­ca con la habi­ta­ción de los jóve­nes espo­sa­dos, ella comien­za a espiar por el mis­mo con­tem­plan­do las rela­cio­nes ínti­mas de la pare­ja; esa acti­tud pare­ce revi­ta­li­zar­la y pron­to indu­ce a Roland para que tam­bién actúe como voyeur. Todo pare­ce­ría suge­rir que la feli­ci­dad radian­te del novel matri­mo­nio sir­ve en par­te para revi­vir los años feli­ces de Roland y Vanes­sa. Una vez más, la rea­li­za­do­ra dedi­ca tiem­po exce­si­vo a la adic­ción voyeu­rís­ti­ca de sus per­so­na­jes cen­tra­les, sola­men­te ate­nua­da por la rela­ción que se esta­ble­ce entre los dos matri­mo­nios, aun­que todo ello con­du­ce a situa­cio­nes de des­con­fian­za que no resul­tan convincentes.

Cuan­do al con­cluir uno lle­ga a ente­rar­se qué es lo que real­men­te le ocu­rrió a Vanes­sa en el pasa­do, la reve­la­ción de nin­gu­na mane­ra sor­pren­de ni jus­ti­fi­ca la des­crip­ción que el guión ha hecho de su per­so­na­je; ade­más, el com­por­ta­mien­to entre cata­tó­ni­co y está­ti­co del mis­mo no le ofre­ce a Jolie Pitt posi­bi­li­da­des de luci­mien­to como actriz. Del res­to del elen­co el úni­co que real­men­te se dis­tin­gue es Ares­tup que a pesar de su rol secun­da­rio otor­ga gran huma­ni­dad a su per­so­na­je cons­ti­tu­yen­do una pre­sen­cia gra­ta en esta his­to­ria. La bella foto­gra­fía de Chris­tian Ber­ger otor­ga un aire de dis­tin­ción al film aun­que no lo sal­va de su medianía.

Con­clu­sión: A pesar de la gran sen­si­bi­li­dad que demos­tró Jolie Pitt en ante­rio­res opor­tu­ni­da­des como rea­li­za­do­ra, en este caso no logra infun­dir el brío nece­sa­rio para que el espec­ta­dor se invo­lu­cre en el dra­ma de una pare­ja en des­com­po­si­ciónJor­ge Gutman