ADULTS IN THE ROOM. Grecia, 2019. Un film escrito y dirigido por Costa-Gavras (Disponible en la plataforma cinemaduparc.com)
Siempre comprometido con un cine sociopolítico, el veterano realizador Costa-Gavras retorna a Grecia para reproducir dramáticamente la crisis de 2015 que afectó al país como integrante de la Unión Europea. Con Adults in the Room el realizador permite al espectador acceder a los entretelones de ese club comunitario y observar lo que acontece durante las reuniones celebradas por quienes se encargan de dirigir y decidir los destinos de los países que forman parte del mismo.

Christos Loulis
Como es bien sabido Grecia, uno de los países económicamente menos sólidos de la Unión, en ese entonces había llegado a un estado crítico al no poder seguir aceptando las restricciones económicas impuestas a su pueblo. Es así que con el nuevo gobierno de izquierda encabezado por el Primer Ministro Alexis Tsipras (Alexandros Bourdoumis) se aguardaba que vientos sociales más favorables soplarían en el estado heleno. Es así que Yanis Varoufakis (Christos Loulis)., el ministro de finanzas designado, tuvo a su cargo la delicada y difícil misión de encarar la crisis griega y rechazar las presiones de austeridad exigidas por los burócratas de la Comunidad.
Basado en las memorias vertidas por Varoufakis en su libro autobiográfico Adults in the Room: My Battle With Europe’s Deep Establishment de 2017, el realizador prácticamente reproduce su contenido ilustrando el enfrentamiento de su autor con los ministros de economía de las naciones de Europa, miembros del Banco Central Europeo y funcionarios del Fondo Monetario Internacional para lograr la modificación de los términos de pago de la inmensa deuda de su país sin tener que continuar comprimiendo los bolsillos de sus conciudadanos. Todo ello tiene lugar en las innumerables reuniones realizadas por el ministro con los jerarcas de turno de la Unión Europea a fin de evitar un colapso monetario que no solo perjudicaría a Grecia sino que eventualmente podría afectar a otros miembros de la asociación de menor envergadura económica. Como en toda negociación, se produce el “tira y afloje” de los participantes involucrados donde Varoufakis debe enfrentar al “establishment” que desea seguir aplicando recortes sociales. La gran frustración del ministro se produce cuando a la postre Tsipras termina aceptando las condiciones impuestas por la Comisión Europea, el Banco Central y el Fondo Monetario, lo que condujo a la renuncia de Varoufakis después de 5 meses y medio al frente del ministerio.
En esencia, Costa-Gavras ilustra cómo la mayoría de los participantes en la sala de sesiones, ignorando todo rasgo de sensibilidad humana, se preocupa más de los fríos números arrojados por los estados financieros que de la miseria sufrida por el pueblo; en otras palabras queda evidenciado el capitalismo rampante que impera en el accionar de los burócratas de la Comunidad.
La observación que merece este documento es que su exhaustivo diálogo unido a la repetición de los continuados debates afectan en parte su ritmo; en todo caso aunque se trate de una obra menor del realizador de Z y Estado de Sitio, su honesto trabajo siempre interesa y eso es lo que realmente cuenta para el cinéfilo. Jorge Gutman