CHRISTMAS ON THE SQUARE. Estados Unidos, 2020. Un film de Debbie Allen. 98 minutos. Disponible en Netflix
Las fiestas se aproximan a todo ritmo y a pesar de las difíciles circunstancias que el mundo atraviesa por la cruel pandemia, el espíritu navideño vuelve a evidenciarse. Por lo tanto Netflix se ha propuesto asociarse al mismo con esta fantasía musical que sin pretenciosidad alguna ha dirigido Debbie Allen. En principio, lo que atrae es la presencia de Dolly Parton, el ícono de la canción country americana, que engalana al film con 14 canciones compuestas y escritas por ella.
El guión de Debbie Allen, basado en la pieza “Christmas on the Square” ubica la acción en el ficticio pequeño pueblo de Fullerville donde sus habitantes están próximos a festejar la Navidad en la plaza central. Allí llega inesperadamente Regina Fuller (Christine Baranski), la hija del fundador de esa aldea que acaba de morir. Como heredera de las propiedades de su padre ella ha resuelto venderlas a una compañía destinada a convertir ese lugar en un gigantesco centro comercial. Es así que su arribo a la aldea altera considerablemente el ánimo de los inquilinos moradores cuando ella les presenta el aviso de evicción para la víspera de Navidad. Entre los que deberán abandonar la aldea se hallan el Pastor Christian Hathaway (Josh Segarra) y su esposa Jenna (Mary Lane Haskell) a cargo de un negocio para infantes y niños, Margeline (Jennifer Lewis), la antigua amiga de Regina que regentea un salón de belleza, Carl (Treat Williams), el ex enamorado de Regina que también está a cargo de un negocio y Mack (Matthew Johnson), un padre monoparental dueño de un bar cuya encantadora niña Violet (selah Kimbro Jones) está a su lado para ayudarlo. Frente a la situación planteada el Pastor convoca a sus vecinos a resistir la demanda de desalojo convirtiendo a Regina en la virtual enemiga del pueblo.
Como todo cuento navideño que debe tener un final feliz allí aparecerá un ángel (Parton) femenino que solo Regina puede ver, logrando que ella desista su actitud y pueda conquistar la simpatía de los aldeanos.
Aunque esta fábula resulta completamente predecible eso no inhibe la condescendencia del espectador en dejarse llevar. Así, el film se contempla placenteramente en la medida que imbuido de buen ritmo la mayor parte de la historia se desarrolla de manera cantada con las agradables canciones de Parton acompañadas de danzas muy bien coreografiadas por Allen; esos elementos contribuyen a que esta comedia musical resalte visualmente. En materia interpretativa, el homogéneo elenco se desempeña correctamente con la destacada participación de Baranski; ella se adueña de la villana Regina que finalmente deja asomar su bondadosa faceta comprendiendo que la Navidad es el tiempo para compartir y demostrar la generosidad humana. Jorge Gutman