N’ATTENDEZ PAS TROP DE LA FIN DU MONDE. Rumania-Luxemburgo-Francia-Croacia, 2023. Un film escrito y dirigido por Radu Jude. 163 minutos
Entre los más destacados realizadores del cine rumano se encuentra Radu Jude quien en su octavo trabajo N’Attende Pas Trop de la Fin du Monde reafirma su condición de cineasta audaz, desprejuiciado, nada convencional y menos aún complaciente para relatar aspectos inherentes a su país aunque también pueden ser atribuidos a otras regiones del agitado y revuelto mundo actual.
En un guión que le pertenece, Jude presenta a Angela Raducanu (Ilinca Manolache), una activa y dinámica mujer que trabaja como asistente de producción para una compañía y que diariamente le aguarda una jornada agotadora debido a las exigencias demandadas por sus superiores a quienes poco les importa el exceso de horas que ella destina al mismo. En la actualidad debe cumplir con los requerimientos de una compañía austríaca que encomendó a su empresa la producción de un video comercial sobre accidentes laborales. Para ello, esta mujer valiéndose de su auto recorre las rutas de Bucarest para localizar a personas que han sufrido tales peripecias. Simultáneamente, Jude utiliza extractos del film rumano de 1981 Angela mere mai departe dirigido por Lucian Bratu en el que su protagonista (Dorina Lazar) es una taxista que convive en un medio patriarcal durante la época del dictador Ceaușescu; esa exposición adquiere relevancia para analizar en qué se diferencia o se iguala la época ya ida con el marco social contemporáneo en donde Angela no está exenta del machismo vigente.
Durante el día en que se desarrolla el relato ella recoge en el aeropuerto a Doris Goethe (Nina Hoss) quien es la representante de la empresa austríaca; mientras la traslada hacia el hotel la conductora le comenta cómo las corporaciones extranjeras abusan de las compañías locales, a lo que Doris replica señalando que el problema radica más bien por parte de quienes se dejan explotar.
Prosiguiendo con su misión de ubicar a sobrevivientes de accidentes en lugares de trabajo, después de encontrar a posibles postulantes Angela finalmente ubica al candidato ideal en la persona de Ovidiu Buca (Ovidiu Pirsan). En un remarcable plano secuencia de aproximadamente 30 minutos se asiste a la filmación del corto “Forbidden Planet” en el que Ovidiu a cambio de los 500 euros que habrá de recibir se apresta a ser filmado rodeado por sus familiares. Es allí que él detalla lo ocurrido el 24 de noviembre de 2020 cuando después de una intensa jornada de trabajo de 17 horas al finalizar la misma y disponiéndose a retirar su coche del aparcamiento del establecimiento es atropellado por otro vehículo; como consecuencia de ese choque él permanece en estado de coma durante 13 meses y al despertar descubre que está paralizado de la cintura hasta las extremidades inferiores por lo que de por vida deberá desplazarse en silla de ruedas. Sin embargo el director del equipo de filmación le hace repetir las tomas varias veces señalándole que no mencione las horas extras de labor realizadas con el propósito de que su testimonio resulte aceptable para la compañía austríaca.
A todas luces esta comedia en parte satírica refleja las irregularidades de corporaciones que en procura del lucro y despojadas de contenido humano explotan a su personal afectando su salud por el exceso de horas trabajadas sin adicional remuneración.
Sin demagogia alguna, a través de lo expuesto Jude efectúa una crítica clara y precisa de los males que engendra el sistema capitalista. Sin duda, esta radical, intelectual y original comedia dramática imbuida de notable franqueza fascinará al cinéfilo ávido de apreciar el alto nivel de calidad que acostumbra ofrecer el gran director rumano.
Jorge Gutman